La Unesco emprendió la iniciativa para preservar el adobe y bahareque en el Centro Histórico. Foto: Xavier Caivinagua/ EL COMERCIO.
Las técnicas arquitectónicas tradicionales que emplean el bahareque y el adobe buscan ser preservadas en Cuenca. Su importancia es relevante porque están presentes en la mayoría de las viviendas patrimoniales del Centro Histórico de la ciudad, que es Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Por ello, se impulsa el proyecto ‘Movilización de mujeres y jóvenes’ por la transmisión de técnicas tradicionales para la preservación de la arquitectura en tierra. Esta iniciativa la apoya la Unesco.
Este proyecto maneja cuatro acciones, que empezaron en junio pasado. La primera consistió en encuentros entre representantes del Municipio cuencano, la Universidad de Cuenca y el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural.
Allí surgieron 20 propuestas para apoyar a la ciudadanía para que conserve estas técnicas. Entre otras, se contará con una oficina de asesoramiento legal y técnicas para la conservación; creación de una cuadrilla de emergencia que intervenga en construcciones en riesgo; crear un banco de materiales; y dar capacitación a los obreros en las técnicas ancestrales.
Según la arquitecta Elisabetta Carnevale, quien fue parte del proyecto, el segundo ámbito del proyecto fue ejecutar una obra demostrativa y mantenimiento durante dos semanas. Con una inversión de USD 2 500 se recuperaron espacios en la denominada Casa del Otorongo.
Dos maestros expertos transmitieron sus conocimientos en técnicas tradicionales. En el taller se enseñó cómo elaborar un adobe, cómo se hace el empañetado o se embarra un bahareque. También hubo módulos de capacitación gratuita para 50 arquitectos y técnicos de la Municipalidad y se presentaron nuevos proyectos utilizando la tierra como elemento fundamental.
La tercera acción consistió en un convenio entre el Municipio, Universidad de Cuenca e Instituto de Patrimonio para constituir un comité para ejecutar las propuestas. Finalmente, se elaboró una guía de las viviendas patrimoniales de tierra del Centro Histórico.
Para Lourdes Abad, miembro de la Red Iberoamericana de Arquitectura y Construcción con Tierra (Proterra), ahora es necesario iniciar campañas de información y capacitación, para que este proyecto trascienda en el tiempo y llegue a nuevas zonas, como las comunidades rurales, donde existen viviendas edificadas con estas técnicas.
Abad considera que es importante capacitar a los arquitectos y maestros sobre la importancia que estas técnicas, para que no se pierdan, pues la tierra es un elemento que puede ser reutilizado en construcción y es amigable con el ambiente.