Sin duda, el hormigón es el material por antonomasia. Es el sistema constructivo más utilizado desde hace mucho tiempo.
Y se utiliza tanto en construcciones de gran envergadura como en pequeñas obras caseras, como pavimentar el patio trasero, levantar una terraza pequeña o realizar una loseta para colocar un asadero.
El hormigón es un material muy versátil, explica el arquitecto Renato Arcos, y se utiliza en infinidad de construcciones.
Es un material de construcción elaborado principalmente con cemento, árido fino (arena), árido grueso (ripio) y agua, aunque actualmente es muy común el uso de aditivos para modificar sus propiedades.
Según el ingeniero Patricio Yépez, la dosificación correcta se la establece en un laboratorio especializado.
Y se lo hace al peso considerando factores de humedad de los materiales a ser empleados. De todas maneras, se puede indicar que para estructuras de hormigón armado se emplea un hormigón de una resistencia a la compresión de 210 ó 240 kg/cm2, para lo cual se utilizan ‘cantidades aproximadas’ de los diferentes componentes.
Así, para 1 m³ de hormigón se utilizan entre 7 y 8 sacos de cemento Pórtland puzolánico tipo I (de 50 kg c/u); 0,65 m³ de arena; 0,95 m³ de ripio; y 0,18 m³ó 180 litros de agua.
Estas medidas funcionan para una losa normal y corriente.
La importancia del agua en la elaboración de un hormigón es esencial, explica Arcos. De ella depende que el material sea consistente y resistente. “También de la calidad de los materiales utilizados, claro está”.
El manual de Holcim para obras pequeñas entrega una tabla (tabulado) que garantiza un hormigón consistente.
¿Cómo preparar un buen hormigón? Primero, explica el manual, coloque la piedra en la máquina concretera.
Luego agregue la mitad del agua y mezcle por 1 minuto. Es muy importante que la cantidad de agua sea la menor posible.
Agregue el cemento. A continuación ponga la arena, el resto de agua y mezcle por 3 minutos.
Antes de usar la concretera revise que esté totalmente limpia pues si no los residuos pueden ‘contaminar’ la mezcla.
Coloque los materiales en el menor tiempo posible y la herramienta siempre debe estar girando. El hormigón que se prepare siempre debe ser vibrado, explica Arcos, pues de lo contrario la mezcla quedará porosa y con poca resistencia.
Cuando funda losas de pisos o contrapisos, explica el manual de Holcim, use un tablón para apisonar. Revise los espesores para que no haya desperdicio de material. En las aceras, los tramos deben ser casi cuadrados y las juntas espaciadas a no más de tres metros.
Cubra los trabajos realizados con plásticos al menos por tres días. Y riegue abundante agua por al menos siete días.
Las proporciones
Para medir la arena y el ripio use cajones (parihuelas) de 0,40×0,40×0,20 cm. Llene bien las parihuelas. Si la arena está mojada llene el cajón con más material para compensar el esponjamiento por la humedad.
El cálculo del volumen es vital. Por ejemplo, para fundir un patio de 9 x3 metros y 8 cm de espesor use la fórmula: 9 x 3 x 0,008 = 2,16 m³.