El equipo de científicos de la empresa japonesa Shimadzu, liderados por el Premio Nobel de Química del 2002, Koichi Tanaka, ha desarrollado una nueva tecnología capaz de acelerar el diagnóstico para los casos del Alzheimer.
A través del nuevo instrumental, los investigadores han logrado detectar pequeñas cantidades de una sustancia que se encuentra en la sangre de las personas que sufren Alzheimer.
El equipo del ingeniero Tanaka logró este avance a través de mejorar la precisión de la tecnología de espectrometría de masas, lo que permite detectar en la sangre la acumulación de proteínas beta-amiloide, una de las probables causas del Alzheimer, después de afectar la transmisión entre las células nerviosas del cerebro del paciente.
Según las investigaciones, esta proteína se acumula en el cerebro durante un período de entre 10 y 15 años antes de que aparezcan los primeros síntomas de la enfermedad.
Al margen de situarse en el cerebro, esta proteína también se acumula en la sangre, aunque en cantidades tan pequeñas que su identificación resulta muy compleja a través de los ensayos habituales, algo que con la tecnología descubierta por el equipo de Tanaka sí será posible.
Hasta este momento a los pacientes se les sometía a pruebas mediante instrumental de Tomografía por Emisión de Positrones, PET, o a través de extraer muestras de líquido cefalorraquídeo, dos procedimientos muy complejos y dolorosos.
La nueva técnica descubierta por el equipo de Tanaka entrará ahora en fase de pruebas en colaboración con el Centro Japonés de Geriátricos y Gerontología.
Con estos ensayos, se espera que el equipo logre determinar la relación entre la cantidad de proteína beta-amiloide presente en la sangre y la aparición de la enfermedad, lo que permitiría anticipar el diagnóstico y crear nuevos tratamientos para los pacientes del mundo.
El científico japonés, nacido en Toyama en 1959, recibió el Nobel de Química 2002, junto con el estadounidense John Fenn y el suizo Kurt W thrich, por sus trabajos sobre las macromoléculas biológicas.