La Asociación de Teatro de Tungurahua junta a cinco colectivos para realizar la obra Ziza la niña que quiso ser cómica. Foto: Glenda Giacometti/ EL COMERCIO
Ziza es una pequeña niña que quiere ser cómica. Para lograrlo se enfrentará a muchas aventuras que durarán cerca de dos horas. Esta historia es la obra central que la Asociación de Teatro de Tungurahua presentará dentro del II encuentro La Fiesta del Teatro en el Carnaval.
El festival es parte de las fiestas de la andina ciudad de Ambato y está previsto del 14 al 16 de febrero del 2015, en el salón de honor de la Casa de la Cultura, núcleo de Tungurahua (calle Bolívar, frente al parque Juan Montalvo). Para ver las funciones hay un solo horario: las 15:00, los tres días. El aporte sugerido para la entrada es de USD 2 los adultos y USD 1 los niños.
La Asociación de Teatro de Tungurahua está integrada por cuatro colectivos: el Teatro Popular del Ecuador, el Teatro del Juglar, el Teatro Entre Comillas y Butaka Teatro. Cada uno presentará su propia obra y participará en la función principal.
Silvia Quinteros pertenece al grupo de teatro Entre Comillas.
Lleva 13 años haciendo dramática, especialmente dirigida a los más pequeños. Ella personifica a Ziza en la obra grande pero también actuará en Ase rín, el episodio particular del grupo. Melina Villacrés y Verónica López forman el colectivo Teatro del Juglar. Con su experiencia de más de 14 años practicando este arte, también se especializan en las obras infantiles. Uno de los proyectos está llevar sus montajes a escenarios internacionales. Villacrés interpreta al hada madrina que dentro de la obra no es el tradicional personaje bondadoso.
El Teatro Popular del Ecuador tiene trabajando 22 años.
Anualmente, la agrupación organiza dos festivales internacionales al año. El festival Tiempo de Teatro y el de Narración Oral: Palabra Andante. En el primero, las presentaciones se realizan en Cotopaxi, Tungurahua, Bolívar, Ibarra y Guayaquil y cuenta con el apoyo de Iberescena que es la organización para el desarrollo de las artes de estados iberoamericanos.
El aporte del organismo internacional se basa en la entrega de los recursos para que la danza y el teatro puedan desarrollarse además de generar espacios para la formación de públicos. En este evento se presentarán agrupaciones de Colombia, Perú, Chile, Argentina, Brasil, México, Uruguay, Venezuela, Costa Rica y Ecuador.
Julia Mayorga, del Teatro Popular del Ecuador, cuenta que precisamente por eso el jueves 12 de febrero se inauguró la escuela del espectador para teatro. “Tendremos cuatro tutorías, una cada mes, luego de las cuales los participantes tendrán una certificación que les permita evaluar una obra artística”.
Están previstos tres conversatorios y talleres especializados sobre las estrategias para llenar las salas de teatro. “Nuestro objetivo es que haya público; recuperar el espacio para las artes escénicas”, añade Mayorga.
En la primera tutoría se presentó la obra Edipo, los ojos que no se llevó el viento con Zaydum Chóez. El experto Héctor Correa, de Cuco Teatro de Quito, fue el encargado de analizar la presentación. Se tomaron en cuenta el estilo, la actuación, los elementos técnicos, la puesta en escena, el montaje… La idea, añade Mayorga, es que el público pueda identificar estos elementos y así pueda entender las razones por las que le gustó o no la presentación artística.