La Universidad Tecnológica Equinoccial, en Quito, desarrolla campeonatos de robots.
Un verano para la programación y la mecatrónica
La enseñanza de robótica para niños puede ser una herramienta para el desarrollo de sus capacidades en el futuro.
Un artículo publicado por la Universidad de Salamanca, en torno a la Teoría de la Educación en la Sociedad de la Información, señala algunos de los beneficios del aprendizaje de nociones de robótica en los niños. Entre estos se destaca un desarrollo adecuado de habilidades de sociabilización, así como de la creatividad y la iniciativa infantiles.
Al ser una actividad multidisciplinaria, el ensamblaje y programación de robots refuerza nociones dentro de las ramas básicas de cuatro pilares básicos de la educación: ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. También, genera ambientes y habilidades de aprendizaje donde los niños comienzan a percibir problemas del mundo real y asociarlos a su entorno inmediato.
Iniciativas como Scratch, desarrollada por el Instituto Tecnológico de la Universidad de Massachusetts (MIT), buscan elevar el potencial de los niños y vinculan la programación con técnicas didácticas de aprendizaje.
El objetivo es desarrollar en los niños varias destrezas digitales que pueden ser de mucha utilidad en un mundo cada vez más interconectado y que utiliza cada vez más herramientas tecnológicas. En la página de Scratch hay disponibles para uso ‘online’ diferentes actividades para padres e hijos.
Empresas como Cognitoys ha creado juguetes que utilizan diferentes herramientas de Inteligencia Artificial del programa Watson, de IBM.
Estos juguetes son pensados para introducir a los niños desde edades tempranas al razonamiento lógico y a la búsqueda de respuestas y de información, así como a la interacción con su entorno.
Los mismo ha hecho Lego. La compañía fabricante de los bloques para armar ha incursionado en los juguetes educativos desde hace algunos años, y en su web Education Lego hay varios kits de actividades disponibles para descarga gratuita.
Apple también tiene herramientas similares en sus tabletas iPad. La aplicación Swift Playgrounds permite desarrollar las capacidades básicas mediante cursos sencillos e interactivos para enseñar los principios básicos de programación para ‘apps’ móviles.
En Ecuador, la Universidad Internacional (UIDE) se ha unido a este tipo de iniciativas, con lo que ha denominado la Kids Scientific University.
Dentro de esta iniciativa, se ha preparado el taller Mechatronic Kids. Se trata de una actividad de aprendizaje preparada especialmente para niños, que se desarrolla en la Facultad de Ingeniería Mecatrónica de la universidad, en su sede de Quito.
Algunas actividades de este tipo se desarrollan también en el Medialab UIO, de Ciespal, en Quito. La próxima, recomendada para jóvenes de 16 años en adelante, comienza en agosto; se trata de un taller de programación para crear videojuegos.
Iván Terceros, productor general del Medialab UIO, asegura que este tipo de actividades ayudan a desarrollar en los jóvenes la capacidad de pensamiento abstracto y pensamiento computacional, además de capacidades lógicas para toma de decisiones.