Los jugadores de El Nacional encantaron con su “jogo bonito” ayer.
Ya aprendieron a trabajar colectivamente, a dominar el balón y a tejer jugadas que dejaron a la hinchada con la boca abierta. Movimientos tácticos que el año pasado casi no se vieron.
Ahora, solo falta que el técnico español Manuel Tomé Portela les enseñe a todos, no solo a sus delanteros, a cabecear frente al arco rival. Los defensas Elvis Bone y Jefferson Hurtado, deberán tomar además una clase adicional de autocontrol.
Este último, ex Deportivo Quito, salió expulsado al minuto 88 con doble tarjeta amarilla.
Corrigiendo esos detalles, Tomé Portela podrá sumar su primera victoria y visualizar, de lejos, al Barcelona de España que en sus sueños se imagina ver jugar.
Hasta ahora, el europeo suma dos derrotas consecutivas. El único triunfo lo consiguió en la primera fecha el ecuatoriano Orlando Narváez, ahora asistente técnico.
Ayer, la falta de definición de los criollos extendió el número de partidos en los que Liga ha sido superior en el marcador. Eso, porque en el duelo de la tercera fecha del torneo local El Nacional controló el balón y fue el protagonista del encuentro, en el que los seguidores criollos se han acostumbrado a salir del estadio con el resultado en contra.
La última victoria (2-1) del plantel militar se registró en diciembre del 2011, cuando con Liga (Q) definieron quién iba a la Copa Libertadores del año pasado.
Desde el 2008, ambos equipos se han enfrentado en 23 partidos. De ahí, 14 han sido a favor del club albo y dos a favor de El Nacional. En los siete encuentros restantes se registraron empates.
A pesar del resultado, que se originó por una falta innecesaria de Elvis Bone sobre Carlos Garcés, la hinchada de El Nacional salió conforme del Atahualpa.
Su equipo se mostró más sólido en el medio campo, comandado por Daniel Samaniego, quien se llevó los aplausos del DT y de los cerca de 8 000 aficionados criollos. En total llegaron 17 101 personas al estadio Atahualpa.
En el partido de ayer este técnico condujo a su equipo con calma, casi no dijo nada, todo lo contrario al técnico Edgardo Bauza, a quien se lo miraba moverse inquietamente de un lado a otro dentro del área técnica.
Tomé solo apartó su mano derecha de la espalda para lamentarse por el gol que anotó el defensa argentino Ignacio Canuto, tras un remate de Pablo Vitti que el golero Bonard García no pudo controlar.
Antes, Carlos Feraud fue el encargado de cobrar el tiro libre, producto de la falta que cometió Bone, a los cuatro minutos.
Después de ese gol, Liga condujo el partido por 15 minutos, pero luego fue El Nacional quien buscó por todos los medios anotar en el arco custodiado por hábil Alexander Domínguez.
Los criollos pudieron salir con un marcador de 4-1, pero la falta de definición de Byron Oña y Juan Govea condenó al equipo a una segunda derrota consecutiva.
Los cambios que realizó Tomé a partir del minuto 51 fueron infructuosos, ya que nada pudieron hacer Marwin Pita y Édison Preciado, convocados por la hinchada desde que el árbitro Carlos Vera dio el pitazo inicial.
Lo mismo sucedió en Liga, cuando Bauza decidió reemplazar a Pablo Vitti por Luis Fernando Saritama, y a Feraud por Hugo Vélez.
Tras la salida del argentino, Liga dejó de hostigar a la defensa y golero de El Nacional.
Antes, Vitti se lamentó haber desperdiciado dos oportunidades de anotar y de haberle dado la tranquilidad al equipo albo y a su técnico que parecía ansioso por vestirse de corto y concretar lo que sus pupilos no lograban hacer.
Con este resultado, el conjunto azucena se ubica en el segundo lugar en la tabla de posiciones. Su próximo partido esta previsto para el viernes, frente al Emelec, el líder del torneo con tres victorias al hilo. El partido se jugará en Casa Blanca, en el norte de la ciudad.
Ignacio Canuto no dejó pasar ni al viento El defensa argentino de 1,88 metros de estatura cumplió al pie de la letra con lo que le ordenó el técnico Edgardo Bauza: impedir que un rival se acerca al arco de Alexander Domínguez. Este jugador, que trabajó que con Norberto Araujo y Koob Hurtado, fue efectivo en la marca, hostigó a sus rivales, que más tarde decidieron arremeter por el otro lado de la cancha, defendido por Hurtado, por donde sí encontraron espacios para asustar a la hinchada alba. Canuto saltó a la cancha como titular y jugó los 90 minutos, aquello es señal de que el defensa central ha logrado conquistar al argentino en cada uno de los entrenamientos. Como recompensa a esa confianza, Canuto marcó el único tanto en el partido frente a El Nacional. Lo hizo cuando parecía que el balón se perdía en los pies de los criollos.