El piloto francés superó por una décima de segundo al
piloto español Dani Sordo
El Campeonato Mundial de Rally (WRC, por sus siglas en inglés) mantiene al francés Sébastien Ogier (Volkswagen) en el liderato.
Después de haberse disputado la novena fecha en Alemania, el pasado fin de semana, el piloto sumó una ventaja de 59 puntos sobre su compañero de equipo, Andreas Mikkelsen.
El noruego ocupa la segunda posición en la clasificación general con 110 puntos, seguido por Hayden Paddon con 94 unidades.
La victoria conseguida en Treves es crucial para las aspiraciones de un nuevo título para el francés. Ogier destacó su estrategia a la hora de gestionar los neumáticos antes y durante la prueba.
“Al igual que el año pasado, la diferencia la marcamos en el Panzerplatte, un tramo muy exigente con las llantas. Parece que uno de mis puntos fuertes aquí fue manejar el uso de los neumáticos mejor que mis rivales. Si nos fijamos en la clasificación, fue allí donde marqué la diferencia”, contó Sébastien a la prensa especializada.
Sin embargo, la jornada del viernes no inició con tanta seguridad para Ogier, pues Mikkelsen tomó las riendas de la carrera al principio. El día estuvo lleno de emociones, ya que el noruego aceleró a fondo su Volkswagen Polo-R.
Pero el liderato de la competencia cambió para el sábado, cuando el francés apretó en cada giro. Gracias a una serie de impresionantes actuaciones en los tramos del Baumholder, Ogier se distanció por 20,3 segundos de su rival.
La lucha por el segundo puesto fue muy reñida entre los pilotos de Hyundai: Dani Sordo, Thierry Neuville y Mikkelsen.
La disputa se definió hasta el final de la carrera, cuando solo 4,1 segundos separó a los corredores. Para suerte de Neuville, su actuación le permitió ganar la Power Stage y así sumar los tres puntos extras, con el que premia este tramo, para el campeonato. Sin embargo, no le alcanzó al piloto belga para ocupar la segunda casilla, que le perteneció a Sordo.
Por su parte, Mikkelsen atribuyó su pérdida de espacio en los sitiales estelares a una falta de efectividad en el frenado. “Hice una buena carrera, pero tuve problemas para conseguir buenas sensaciones con los frenos al final. Hemos cambiado a unas pastillas de frenos a lo que no estamos acostumbrados”,
explicó el noruego.
Los pilotos tendrán casi un mes de para hasta la próxima cita, que se disputará del 29 de septiembre al 2 de octubre, en la isla de Córcega (Francia). Esta pausa en el campeonato está determinada por la suspensión del rally de China, que debía disputarse a comienzos de septiembre. La fecha fue cancelada por el mal estado
del trazado, debido a la fuerte temporada de lluvias en ese país.
Fuente: Agencia AFP y www.wrc.com