Neuville y su copiloto Gilesoulwon celebraron la victoria junto a sus rivales del equipo Volkswagen.
El belga Thierry Neuville (Hyundai) tuvo el mejor cumpleaños de su vida el fin de semana pasado. El joven piloto llegó a los 28 años de edad, sumando uno de sus mayores éxitos en su carrera profesional, una victoria contundente en el Rally de Italia.
Los caminos de tierra de Cerdeña se convirtieron en el escenario ideal para que Neuville demostrara su más alto nivel de conducción y dejara atrás al campeón reinante Sébastien Ogier (Volkswagen).
Thierry dominó la competencia desde la vuelta inicial con desplazamientos precisos y limpios. Una muestra de su táctica agresiva se evidenció el domingo cuando atacó desde el inicio a sus rivales para adueñarse de las dos especiales de Cala Flumini (ES16 y ES18) “Ganar era el objetivo de este fin de semana tras los dos rallies discretos que había tenido en Argentina y en Portugal” dijo el vencedor.
Además, el belga ratificó su éxito en Italia gracias a la buena partida que había logrado. “Aquí sabíamos que con nuestra posición (de salida) podíamos empezar bien. Salió perfecto y me sentí realmente satisfecho. Hacía mucho que no había funcionado también en el auto en una carrera”, añadió Neuville antes de participar en la ceremonia de premiación.
Gracias a este resultado, el nacido en Sankt Vith (Thierry) sumó el segundo triunfo en su historial -en el Campeonato Mundial (WRC, por sus siglas en inglés)- después del obtenido en el Rally de Alemania 2014. “Los reglajes explican en gran parte las cosas. Hicimos una buena sesión de ensayos aquí en Cerdeña antes del rally. Son caminos muy técnicos y los aprecio enormemente porque en general yo hago un pilotaje muy limpio, intento siempre ser eficaz. Esto sirvió para vencer nuevamente”, explicó.
Jari-Matti Latvala mostró un buen nivel durante la carrera en Italia sin embargo sus habilidades no fueron suficicentes en esta ocasión.
El segundo lugar fue del finlandés Jari-Matti Latvala (Volkswagen), quien intentó acercarse al líder de la jornada sin éxito alguno.
Por su parte, Ogier vivió un capítulo aparte en el que pareció que su cabeza estuvo en otro lugar. Tras rescatar un tercer lugar con gran dificultad, el piloto francés se trasladó inmediatamente hacia Alemania. Allí, su esposa estaba lista para dar a luz a su primer hijo.
A pesar de este contexto, Sébastien descartó que su actuación se haya visto afectada por este acontecimiento y señaló que el desenlace fue el esperado. “Misión cumplida. El resultado estuvo cerca de lo que había previsto. Tuve que luchar muy duro para buscar este tercer puesto, si añadimos los tres puntos (de bonificación) de la Power Stage (ES19) me voy conforme”, declaró Ogier a los medios.
El defensor al título y actual líder de la competición también resaltó que parte de la estrategia de su escudería es sumar puntos bajo cualquier situación. “Tenemos un buen margen en el campeonato, 64 puntos. Es una ventaja significativa que habrá que administrar en la segunda parte del certamen. Es más que positivo, no hay ningún error que achacarnos. Tengo la impresión de buscar lo máximo en cada carrera y sumar puntos siempre”, concluyó el triple campeón mundial. La próxima carrera se disputará el 3 de julio en suelo polaco.