Walter Chalá ya conocía que era jugador del Rubin Kazán ruso desde el 1 de enero. Pero ayer, en Carcelén, antes del entrenamiento del Deportivo Quito (09:00), Jorge Guerrero, representante del delantero, recién confirmó la noticia ante los periodistas.
Esto originó que al menos 15 comunicadores partieran hacia la Casa de la Selección, en el sector de Monteolivo (en la Av. Simón Bolívar) para entrevistar al integrante de la Tricolor Sub 20.
A las 12:00 culminó la práctica y todos abordaron al ariete del Dep. Cuenca. Querían su reacción ante esa transferencia. Los camarógrafos y fotógrafos buscaban tomar el mejor ángulo del delantero que cumplirá 19 años, el 2 de febrero.
Pese a la presencia de los periodistas y ante las miradas de los técnicos Sixto Vizuete y Reinaldo Rueda, Chalá se mostró sereno y respondió a las preguntas.
Dijo que ya conoció su vinculación al Rubin Kazán y que partirá a Rusia luego del Campeonato Sudamericano, en Perú, en compañía de sus padres, Walter Chalá y Maritza Vásquez.
En una transferencia histórica para el Cuenca, los derechos deportivos de Chalá serán vendidos en USD 1 millón, cifra que se hizo pública y que no fue desmentida por la dirigencia del equipo azuayo.
Según Julio León, presidente del ‘Expreso Austral’, aún no está finiquitada la negociación.
El club espera un primer aporte económico para firmar el contrato. Pero adelantó que del monto total de la transacción, el club pagará el 10% al jugador imbabureño. El dinero se entregará por cuotas.
El directivo aseguró que una vez que se firme el contrato de Chalá al fútbol ruso, se dará un paso sin precedentes para la institución. “Pocos lo conocían hace cinco meses”, recordó. Walter Chalá ganaba USD 240 al mes. Si va a Rusia su salario superará los USD 25 000.
El 28 de julio del 2010 salió del anonimato tras marcar un gol en la portería de Liga de Quito. Entró a la cancha al minuto 82 y cuatro minutos después marcó el 1-1. Walter es sobrino de Cléber Chalá, ex seleccionado y jugador de El Nacional.
Su otro tío es Juan Guerrón, quien este año jugará en Liga de Loja. Él lo vinculó al Deportivo Cuenca, en abril del 2009, luego de que su sobrino se entrenó por tres meses en Liga de Quito.
Allí no se sentía bien y pidió probarse en el club cuencano. Firmó contrato hasta el 2013.
Guerrón jugó un papel protagónico en la carrera del juvenil. Él lo ayudó con los pasajes para trasladarse a las prácticas del equipo de reserva, también con la alimentación y la vivienda. Incluso le compraba zapatos.
El delantero concretó 21 goles en la temporada 2010 con el Cuenca. 14 tantos los marcó en 24 cotejos en el equipo de reserva y siete con el plantel profesional, en los 19 cotejos que actuó como alternante y titular.
En los dos años que vivieron juntos, Guerrón se convirtió en su guía. “No he jugado en Rusia, pero le he dado consejos básicos por mi experiencia en el fútbol”, dijo el lateral. Él está seguro de que triunfará en el exterior por su técnica.
Guerrón no ocultó su felicitad por la transferencia de Chalá, aunque reconoció que hace un mes se sorprendió cuando supo de la posible vinculación al fútbol ruso. El defensa de la Liga de Loja opinó que la presencia del ecuatoriano Christian Noboa, como compañero, será clave para ganar confianza, algo que el mismo Chalá reconoció.
“Me hará bien tenerlo de compañero. Podré adaptarme pronto al fútbol y a la cultura de ese país”, indicó ayer. Chalá pertenece a una familia de futbolistas. Su padre fue delantero, jugó en Macará e integró la selección Sub 20. Su hermano Jeison (15 años) y su primo, Kely Vásquez Chalá (17), jugaron en el 2010 en el Cuniburo, de Pichincha. Luis Leguizamón, quien lo dirigió en el equipo cuencano, está seguro que triunfará en Rusia.