Uruguay eliminó ayer a Argentina por 5-4 en la tanda de penales y jugará las semifinales de la Copa América ante Perú.
El tiempo reglamentario acabó 1-1, así que fue necesario ir a la prórroga, en la que el marcador no se movió.
El plantel del DT Óscar Tabárez abrió la cuenta a los 5 minutos con un gol de Diego Pérez, mientras Gonzalo Higuaín consiguió la igualdad a los 17′.
Ninguno de los dos equipos pudo quebrar la paridad y la historia se resolvió por penales.
En una versión moderna del Maracanazo que logró hace exactamente 61 años, Uruguay tuvo una ejecución perfecta al convertir Diego Forlán, Luis Suárez, Andrés Scotti, Walter Gargano y Martín Cáceres.
Por Argentina lo hicieron Lionel Messi, que puso fin a 15 partidos oficiales de sequía, Nicolás Burdisso, Javier Pastore y Gonzalo Higuaín. El héroe de la noche fue el arquero celeste Fernando Muslera, que atajó el de Carlos Tevez y dejó afuera al combinado anfitrión de la Copa.
Fue un final a tono con un clásico del Río de la Plata tan aguerrido e intenso como habían pronosticado ambas partes, con predominio argentino primero y un crecimiento uruguayo después, permitido por un combinado anfitrión que se desordenó.
El conjunto del DT Sergio Batista acorraló en el alargue a los muchachos de Tabárez, pero aun así no pudo desequilibrar.
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Con un Leo Messi eléctrico, pero que no siempre pudo conectar con sus socios, Argentina fue tomando dominio de la pelota a lo largo de un primer tiempo muy intenso. El combinado charrúa recurrió a un juego violento y mucha presencia física, que derivó en la expulsión de Pérez a los 38′, al acumular dos amarillas.
Argentina también quedó con diez hombres, a los 86′, por doble amarilla del capitán Mascherano, que le cedió la cinta de capitán a Messi.
Uruguay se mostró en tanto muy peligroso en las jugadas de pelota parada, como marcó al comienzo. Diego Forlán pateó un tiro libre que Martín Cáceres conectó al arco pero Sergio Romero le dio un rebote a Pérez, que la empujó adentro ante la inacción de la defensa argentina.
El riesgo se repitió una y otra vez que los celestes tuvieron juego aéreo en el área ya sea con tiros libres o de esquina, con una defensa argentina que la pasó mal para salvar su arco.
El conjunto anfitrión logró la igualdad en una jugada magistral de Messi a los 17’, con un preciso pase al área chica que Higuaín cabeceó a la red.
Con una actuación cuestionada, el árbitro paraguayo anuló luego otro gol a Higuaín por posición adelantada a los 30′, y cinco minutos más tarde otro tanto de Uruguay, de Martín Cáceres, también por off-side, esta vez de Diego Lugano.
El triunfo inclinó las estadísticas del clásico en la Copa América a favor de Uruguay, que ahora lidera con 14 victorias sobre las 13 de su rival. Y marcha ahora rumbo a su título sudamericano número quince, a la vez que deja a la Argentina de Messi de nuevo sumida en la depresión.