Alfonso Harb es periodista de profesión e inclusive se desempeñó como dirigente gremial, pero dejó los medios de comunicación en el 2002 cuando fue electo diputado de Guayas por el Partido Social Cristiano (PSC).
En el Congreso Nacional (ahora Asamblea Nacional) destacó por su personalidad cargada de hechos polémicos. Fue cuestionado cuando sacó un arma de fuego en el pleno del Congreso.
Durante su etapa legislativa, tuvo constantes enfrentamientos con el también diputado por el partido Sociedad Patriótica, Renán Borbúa. El ‘Pocho’, como se lo conoce al dirigente, fue acusado de tener ingerencia en los contratos que realizaba la compañía telefónica Pacifictel.
Después de su paso por el Congreso se convirtió en la mano derecha de León Febres Cordero, presidente de la República entre 1984 y 1988, y alcalde de Guayaquil entre 1992 y el 2000. En su momento se dijo que era el reemplazante de Javier Sandoval, quien era el secretario personal de Febres Cordero en su etapa de alcalde.
Harb reapareció públicamente el año pasado cuando fue nombrado presidente de la Comisión de Fútbol de Barcelona por Eduardo Maruri. Renunció siete meses después de ser posesionado por discrepancias con el gerente deportivo del club, Ángel Gómez. En noviembre pasado regresó a ese cargo por pedido de Maruri y tras la renuncia de Carlos Manzur, el presidente de la Comisión.
Harb se ha caracterizado por sus fuertes frases, que encienden polémicas. En estos meses, calificó a los emelecistas de “frustrados de la Sudamericana”, expresó que al DT Carlos Sevilla le “temblaban las piernas” en las finales y acusó al árbitro José Carpio de estar parcializado con Emelec.