Sudáfrica siente la presión de ser anfitrión de la Copa del Mundo. Los aficionados no solo quieren presenciar partidos, sino que además buscan que el equipo de los ‘Bafana- Bafana’, logre cosas importantes en el torneo que se iniciará mañana.
La creciente presión sobre el anfitrión Sudáfrica de cara al inicio del Mundial subió un peldaño ayer. Jacob Zuma, presidente del país africano, visitó ayer el campo de entrenamiento de la selección local de fútbol.
Zuma le manifestó al equipo que sus manos están ansiosas por tocar el trofeo dorado al final del torneo. De esta forma, el mandatario puso un objetivo complicado para una selección que en el análisis previo ha sido descartada para el título.
El Presidente expresó que confiaba en que el equipo pudiera ganar el Mundial que comenzará mañana en el estadio Soccer City de Johannesburgo. Allí Sudáfrica enfrentará a México, desde las 09:00 (hora de Ecuador por el grupo A). Esta llave también está integrada por Uruguay y Francia, que se miden en Ciudad del Cabo, mañana desde las 13:30.
En Sudáfrica, hay un sentimiento unificado de optimismo y alegría entorno a la Selección. Ayer miles de personas se agruparon en las calles para ovacionar a los jugadores mientras atravesaban un corto camino en un autobús abierto.
El apoyo al equipo nunca había sido tan efusivo como ahora, ni siquiera cuando ganó la Copa Africana de Naciones en 1996. La Selección también se reunió con el ex presidente Nelson Mandela, la semana pasada
La presión está sobre Sudáfrica y por ello México, su rival de mañana, trabaja con tranquilidad. Ayer la principal novedad del entrenamiento, fue la presencia de Hristo Stoichkov, ex goleador búlgaro del Barcelona. Él es amigo del técnico Javier Aguirre.
Uruguay, que juega con Francia, es el primer equipo sudamericano en debutar en el torneo. Ayer una delegación de la FIFA llegó sorpresivamente a su concentración en Kimberley para realizar un control antidopaje a ocho jugadores charrúas.
En el elenco del técnico Óscar Washington Tabárez reina el optimismo. Los jugadores están confiados de lograr una victoria ante los galos.