El Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa) empezó a presionar al Club Sport Emelec para que pague una deuda vencida cercana a los USD 500 000.
Ayer en la mañana, un piquete de militares realizaron un peritaje a los bienes que posee el club deportivo en el estadio George Capwell. Esta acción se realizó debido a una deuda que mantiene con el Issfa por la utilización del Complejo Deportivo de los Samanes para sus entrenamientos, ubicado al norte de la ciudad.
La inspección fue realizada por cerca de 20 efectivos de las Fuerzas Armadas que recorrieron todas las áreas del estadio con el permiso de Elías Wated, presidente del club Emelec.
Rafael Candel, representante legal de Emelec, indicó que no hay orden de embargo sino una providencia que dispone para que se realice un peritaje de avalúo económico de bienes.
Además señaló que los abogados del Club, en enero del 2008, dos meses después de que la directiva se posesionó, tuvieron conocimiento de un contrato de arrendamiento entre Emelec y el Issfa (propietario del Complejo Deportivo de los Samanes).
El contrato que se había firmado, según Candel, tiene una falencia jurídica. El Issfa había establecido el aumento anual del canon de arrendamiento del 30%, a lo que la Ley de inquilinato indica que es del 1 al 12%..
La deuda que tiene Emelec es por juicio de coactiva por el arrendamiento del complejo.
“El club mantiene diálogos con el Issfa pero no quiere seguir con el pago de los valores mientras no haya una reliquidación de los mismos y se baje el aumento del arriendo”, dijo Candel.
Sin embargo, el Issfa ha realizado una demanda de desahucio. El departamento jurídico del Emelec respondió la demanda con una crítica por las irregularidades jurídicas del contrato y del interés por mora que quieren cobrar los militares al Club.
Candel expresó que, si la demanda va a términos reales, la deuda será entre USD 260 000 y 280 000. “ Emelec estaría dispuesto a pagar con un acuerdo con el Issfa o a través del juez primero de inquilinato, quién está a cargo de la demanda”.
El Estadio Capwell es de propiedad de más de 300 socios. La Ley de Deportes, señala que los estadios son inembargables.