Antonio Valencia volvió a jugar el sábado después de cinco meses de inactividad por una luxación de tobillo. ¿Puede un futbolista volver a exhibir el mismo nivel de juego que el que tenía antes de una lesión?Eso es imposible. Después de una lesión tan grave como la de Antonio (Valencia) un futbolista queda con temores y eso reduce su respuesta en el campo de juego. Se piensa una y dos veces antes de ir a chocar con un rival porque se cree que, nuevamente, se va a producir una lesión similar o más grave.
Usted se refiere a las secuelas psicológicas. ¿Es esta más grave que cualquier trauma físico?
Sin lugar a dudas. Más aún si el futbolista atraviesa por el mejor momento de su carrera, es fundamental en su club y un aporte valioso para la selección de su país. Es muy traumática una lesión porque los futbolistas están acostumbrados a competir cada semana y a entrenarse todos los días. Entonces, de un momento a otro ver que no se puede hacer nada de eso y encontrarse postrado en una cama debilita mentalmente a cualquier deportista
Usted sufrió una lesión de rodilla después de una agresión del boliviano Rolando Coimbra que prácticamente lo obligó a retirarse. ¿Logró tener el mismo nivel de juego después de pasar más de un año sin poder jugar?
Jamás volví a ser el mismo. Tenía muchos temores. Antes de entrar a la cancha, cuando volví a jugar, recordaba los instantes en que se produjo la lesión y eso provocaba que me desconcentrara y no rindiera lo que el técnico esperaba. Yo tenía apenas 24 años y mi carrera estaba en franco ascenso. Era titular en Emelec y en la Selección Nacional. Pero tanto me afectó la lesión que nunca pude volver a jugar un partido oficial con la Tricolor.
Pero usted alcanzó más logros con Emelec después de la lesión que antes de ella…
Eso es cierto y eso tiene que ver mucho con el plantel que conformó la dirigencia del club luego de mi lesión. Antes de lesionarme solo había ganado un campeonato y un vicecampeonato, después quedamos campeones en dos ocasiones y segundos en una.
¿Siente el mismo temor el futbolista que se lesiona después de una agresión de un rival que el que lo hace luego de un movimiento mal ejecutado?
No, son dos cosas distintas. Cuando la lesión surge después de la agresión de un rival siempre quedará el temor cuando nuevamente tenga que pelear una pelota o cuando algún contrario se acerque. Quien se lesiona por un movimiento fortuito en la cancha suele perder ese temor más rápido y por ende puede recuperar más rápido su nivel y ritmo de juego.
¿Qué es más importante en el proceso de rehabilitación en este tipo de lesiones?
Sentir el apoyo de la familia, del club y de la hinchada. Eso, sumado a una buena cirugía y a una rehabilitación responsable ayudarán a que el deportista sienta que le importa no solo a sus padres y a su esposa, sino también a quienes lo alientan en el campo de juego todos los fines de semana.
¿A qué se refiere cuando dice una rehabilitación responsable?
A que el jugador debe cumplir con todo el proceso de recuperación y no anticipar su retorno a las canchas. Es normal sentir ansiedad por volver. Pero se corre el riesgo de que la lesión recrudezca. Se debe cumplir con el proceso y el tiempo necesario.
En el caso de Antonio Valencia, él tenía a un reemplazante en la banca (Nani). Hay clubes, en Europa básicamente, que contratan a otro jugador para sustituirlo mientras dure su recuperación. ¿No afecta también aquello mentalmente al futbolista?
Eso es cierto. Pero ahí en ese momento es donde deben aparecer los dirigentes del club y el técnico para respaldar al jugador y hacerle saber que cuenta con la confianza del club. El apoyo y el respaldo de la familia son fundamentales, al igual que el de la hinchada, pero el futbolista lesionado tiene en juego su carrera, la profesión que le da de comer. Por eso es fundamental que sienta a los directivos cerca de él y preocupado por su bienestar.
¿Cree que Antonio Valencia se hubiera recuperado igual en Manchester que en Ecuador?
De ninguna manera porque allá (en Inglaterra) la medicina está muy avanzada y el jugador se ha concentrado en su rehabilitación. En Ecuador hubiera tenido muchas tentaciones. Yo conozco a nuestros futbolistas y a quienes los rodean. Acá hubiera estado sometido a muchas desconcentraciones.
¿A qué tipo de desconcentraciones se refiere?
A las visitas constantes de amigos. A las invitaciones de clubes, los compromisos con la Selección…
El nivel de competencia en la Liga inglesa es más exigente que el de nuestro campeonato. ¿Puede eso complicar la recuperación de su ritmo de juego?
Sin lugar a dudas porque es un fútbol en el que hay más contacto y más roce. Pero Antonio es fuerte física y mentalmente. A partir de ahora será fundamental que sume minutos en cancha para que vaya paulatinamente recuperando su nivel.
¿Contra qué tendrá que luchar Valencia a partir de ahora?
Contra el tiempo que ha perdido, contra el jugador que lo está reemplazando en su puesto y contra sus temores. Pero estará nuevamente en su mejor nivel para la Copa América.