La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, informó este martes 18 def febrero del 2014 que invitará al papa Francisco, un fanático del fútbol, a la Copa del Mundo que se disputará del 12 de junio al 13 de julio en Brasil. Aprovechando una reunión que mantendrán este viernes 21 de febrero en el Vaticano.
“Voy a invitarlo a la Copa del Mundo“, dijo la presidenta brasileña, al anunciar que tiene previsto encontrarse con el pontífice este viernes en el Vaticano. La mandataria participará del Consistorio que designará nuevos cardenales, entre estos el brasileño Orani Tempesta, arzobispo de Rio de Janeiro, y será recibida por Francisco.
Rousseff destacó que alentará a su selección durante la cita mundialista. “Él tiene que ser hincha de su equipo, yo seré hincha de Brasil“, dijo Rousseff. Brasil y Argentina son eternos rivales en el fútbol.
Antes de informar de su intención de invitarlo al Mundial, Rousseff elogió al papa: “Tiene un compromiso con los pobres. Lo respeto mucho por eso y también por el hecho de que es un papa latinoamericano, argentino”.
El papa, antiguo arzobispo de Buenos Aires, es hincha desde niño de San Lorenzo de Almagro -que se proclamó campeón del torneo 2013- y en varias ocasiones ha recordado que acudía con su padre al famoso estadio del Gasómetro para seguir los partidos.
En el mítico estadio Maracaná de Río de Janeiro, donde se jugará la final del Mundial, el equipo del papa perdió la semana pasada 2-0 contra el club brasileño Botafogo, en el marco de la segunda fase de la Copa Libertadores.
En una anterior visita al Vaticano tras la asunción de Francisco, Rousseff había bromeado que Argentina podía tener un papa, pero Dios era brasileño, una popular broma en este país con enormes riquezas naturales.