Esta tarde, hasta las 17:00, en Guayaquil, Alfredo Intriago, presidente del gremio de Árbitros, dará un pronunciamiento oficial si los árbitros dirigirán o no los partidos del fin de semana en todas las categorías del fútbol ecuatoriano.
El gremio arbitral está inconforme con la sanción impuesta por la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) al Pilahuín Tío, equipo de la Segunda Categoría que juega en Imbabura. Este club no podrá jugar con público en su estadio por los incidentes del último partido ante Delfín. Allí hubo una agresión a los árbitros y hay videos de los incidentes.
Intriago argumentó su desacuerdo con la sanción impuesta y expuso lo ocurrido el martes pasado en la sesión de la FEF. “El Presidente (Luis Chiriboga) me dijo: no vamos a permitir que estas salvajadas se sigan dando en el fútbol ecuatoriano. Cualquier persona o club que recurra a estas salvajadas va a quedar fuera del torneo”.
El representante del gremio arbitral en su defensa agregó: “Cuando íbamos abandonando la FEF, se me comunica que han cambiado la decisión. No se pueden burlar de algo ya decidido. Por eso es el malestar”.
Intriago fue sutil en su amenaza y entrelíneas advirtió la posible paralización. De su parte, Álex de la Torre, presidente de la Comisión Disciplinaria de la FEF, aclaró como se aplicó la sanción al Pilahuín Tío. Se lo hizo en base a los informes.
Así, en el informe del Comisario no existe ningún detalle de lo ocurrido en el estadio Olímpico de Ibarra. En el informe del árbitro central se escribió que el médico y el preparador físico del club intentaron agredirles al finalizar el compromiso, pero que fueron detenidos por la Policía Nacional.
Además se agrega que ingresaron algunos hinchas. En una línea se puso que aficionados agredieron al cuarto árbitro. En el informe de la Comisión de Seguridad se detalla que hubo correteo a los árbitros y que el cuarto árbitro se tuvo que “fajar a puñetes”.
En la explicación de De la Torre se argumentó que el martes pasado mientras la Comisión Disciplinaria estaba reunida él le dijo a Chiriboga que si había la posibilidad de que expulsarán al Pilahuín Tío del torneo. Sin embargo, hubo un hecho que cambió la decisión, según contó De la Torre.
Mientras se discutía el tema en la sesión, el presidente de la Asociación de Imbabura, Nelsón Aguirre, apeló el informe de la Comisión de Seguridad de la FEF porque no estuvo ningún delegado de la misma en el compromiso. Consultado José Vinueza, de la Comisión de Seguridad, reconoció que no hubo nadie. “Físicamente es imposible que estén en todos los partidos”, dijo De la Torre.
Con esos antecedentes se espera que esta tarde se encuentre una solución al tema. Sin embargo, la FEF aclaró que no se podrá cambiar la sanción impuesta de un momento a otro.