Fue un partido extraño. Tuvo un gol que no fue, hubo expulsados y un primer tiempo que duró 57 minutos por la expulsión del arquero visitante Francisco Mendoza.
Pese a eso, la goleada de Barcelona contra Macará fue contundente. Los canarios vencieron 4-1 a los ambateños anoche en el estadio Monumental.
El delantero José Ayoví abrió el marcador a los 22 minutos luego con un potente remate de media distancia.
A Macará se le había hecho fácil asentarse en el campo de juego. Lo hizo creando jugadas de riesgo a través de Jhonny Baldeón y Mario Lastra.
Pero el minuto 27 fue una pesadilla para el cuadro visitante. El guardameta Mendoza y el técnico Homero Valencia fueron expulsados del campo de juego. El primero por una falta contra Ayoví y el segundo por reclamos al juez central.
De ahí en adelante, aunque con intermitencias, Barcelona tomó el control del partido. Pero Macará cargó de tensión a los toreros en el segundo tiempo con un tanto del veloz delantero Carlos Quintero.
El cuadro local reaccionó y logró ponerse nuevamente en ventaja a través del volante colombiano José Antonio Amaya a los 62 minutos.
Ocho minutos después, el árbitro Roberto Alman validó un tanto de Narciso Mina. La pelota no entró en su totalidad, pero amplió el marcador.
El cuarto y el último gol del partido lo marcó anoche el mediocampista Hólger Matamoros a los 84 minutos con un fuerte remate cruzado.
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