El delantero Michael Estrada protege el balón ante la marca del argentino Richard Schunke, uno de los cinco refuerzos contratados para este año. Foto: David Paredes / EL COMERCIO
Independiente del Valle invertirá USD 1,5 millones en sus divisiones formativas. Este monto representará el 30% de su presupuesto para toda la temporada.
La apuesta por los jóvenes es parte del modelo de administración del club del valle, hace 10 años. Desde que ascendió a la Serie B, en el 2007, empezó a promover y a consolidar a una generación que llegó al subcampeonato de la Libertadores, en el 2016.
La base de ese equipo titular se marchó en las últimas dos temporadas, por lo que se empezaron a promover a otros formados en las canteras con la intención de que lleguen a Primera. Para que encuentren espacio, se marcharon los experimentados uruguayos Cristian Núñez y Mario Rizotto.
La intención es que sean rodeados por gente de experiencia y den el salto en el futuro. Sin embargo, aún no se han consolidado en el plantel principal. Se destacan más bien futbolistas que se unieron en los últimos años como el delantero Michael Estrada, quien hizo 15 goles en el campeonato 2017.
Pero los directivos consideran que la fórmula de promover jóvenes es la adecuada y con ella afrontan el inicio del año futbolístico: Independiente visita al Banfield de Argentina, a las 19:30 de hoy, en el juego de ida de la segunda fase de la Copa Libertadores.
Se trata de la quinta participación consecutiva de los rayados en el certamen internacional. “Es el torneo más difícil de Sudamérica por todo lo que implica: el calendario, la logística, los rivales… Pero nuestro objetivo no cambia. Vamos a luchar por los primeros lugares”, expresa Santiago Morales, gerente general.
El directivo admite que en la Copa, Independiente ahora tiene una imagen que cuidar y promover su marca, enfocada en los jóvenes. La inspiración del club es la Aspire Academy, un centro de formación de jóvenes jugadores impulsada por el Gobierno de Qatar con miras al Mundial 2022.
En ese centro deportivo se forjan futbolistas con entrenadores de diversos países, pero con una misma metodología de juego que se replica en todas las categorías.
Con la imagen de ese organismo, Independiente trabaja con sus jugadores y solo reclutó a cinco refuerzos, una cantidad mínima en relación a otros planteles como Aucas, que hizo hasta 13 fichajes.
Los negriazules contrataron al arquero Hamilton Piedra, el zaguero Richard Schunke, el lateral Marcos Cangá y el mediocampista Gustavo Bustamante, quienes se encuentran entre los 23 y 29 años.
El último en incorporarse fue Cristian Pellerano, argentino de 35 años. Según el técnico Gabriel Schürrer, la llegada del mediocampista era clave para imponer experiencia en el cuadro principal.
Detrás de ellos, hay una nueva generación que se abre espacio. Son los jugadores que competirán en la Libertadores Sub 20, torneo que se iniciará el 10 de febrero, en Uruguay.
A la par, jugadores de otras categorías del cuadro del valle competirán en torneos de la región y de Europa, durante la temporada.
El DT Gabriel Schürrer quiere observar de cerca a todos ellos durante este año, aunque admite que su principal preocupación es que el plantel de Primera tenga un buen rendimiento y alcance resultados.
Para el argentino, quien el año pasado estuvo en el Cuenca, Independiente tiene un estilo definido y lo respetará. “Me encontré con un ‘ADN’ bien marcado: con un buen trato de balón y velocidad. Lo mantendremos porque es algo característico del club. Esa es su huella”.
Eso sí, el estratega quiere que sus dirigidos tengan más ritmo de juego. Para eso, realizó amistosos ante Técnico Universitario, Universidad Católica y El Nacional. Lo hizo en las últimas tres semanas antes del juego copero de esta noche.
Será el estreno de Schürrer en el banquillo rayado. La revancha será el 6 de febrero, en el Atahualpa. El ganador avanzará a la fase tres en busca de un cupo a la fase de grupos.