Vettel llega líder a Sochi, donde se espera nuevo contraataque de Hamilton

Sebastian Vettel (centro) celebra su victoria en Baréin en el podio junto con Lewis Hamilton y el finlandés Valtteri Bottas de Mercedes. Foto: AFP

Sebastian Vettel (centro) celebra su victoria en Baréin en el podio junto con Lewis Hamilton y el finlandés Valtteri Bottas de Mercedes. Foto: AFP

Sebastian Vettel (centro) celebra su victoria en Baréin en el podio junto con Lewis Hamilton y el finlandés Valtteri Bottas de Mercedes. Foto: AFP

El piloto alemán Sebastian Vettel (Ferrari), que, después de ganar la prueba inaugural en Australia, consiguió una nueva victoria en Baréin, entrará líder en la olímpica Sochi, sede del Gran Premio de Rusia, en el que se espera un nuevo contraataque del inglés Lewis Hamilton (Mercedes); vencedor en China y segundo en el Mundial de Fórmula Uno, a siete puntos del germano.

En sólo tres carreras, Vettel -que encabezó el periplo glorioso de Red Bull, con cuatro títulos entre 2010 y 2013- ha confirmado a Ferrari como alternativa al brutal dominio que ejerce desde hace tres años Mercedes, escudería para la que Hamilton logró, en 2014 y 2015, las dos coronas que unió a la de 2008 -con McLaren- para convertirse en triple campeón mundial.

Salvo alguna sorpresa, en el Gran Premio de Rusia -que se disputará en Adler, a orillas del Mar Negro, en el circuito construido dentro del anillo olímpico de los últimos Juegos de invierno, en 2014; y que también será una de las sedes del Mundial de fútbol, el año próximo- se prevé un nuevo duelo entre los dos pilotos más laureados en activo.

En una pista de 5 848 metros, con dos zonas de DRS -antes de la segunda y de la decimotercera de sus dieciocho curvas-, a la que el domingo está previsto dar 53 vueltas, para cubrir 311 kilómetros, en la que se correrá por cuarta vez y en la que sólo ha ganado Mercedes.

Hamilton logró allí dos de sus 54 triunfos en la categoría reina del automovilismo en 2014 y al año siguiente; y el alemán Nico Rosberg lo hizo la temporada pasada, en la que festejó el título mundial sólo cinco días antes de anunciar su retirada de la F1.

El de Sochi es el tercer circuito más largo del Mundial, en una localidad prácticamente pegada a Georgia y en el que se rodará -con neumáticos de compuestos ultrablandos (reconocibles por la raya morada), superblandos (roja) y blandos (amarilla)- a partir de este viernes, cuando arranquen los entrenamientos.

Las pruebas libres se completarán el sábado antes de la calificación, que ordenará la parrilla de salida de la carrera dominical. Con miras a la cuál el español Fernando Alonso (McLaren-Honda) considera que "sería un éxito acabar con los dos coches", en referencia al suyo y al de su compañero belga Stoffel Vandoorne.

En otra campaña que -tras tres pruebas- se prevé triste para la escudería de Woking, el doble campeón mundial asturiano (2005 y 2006, con Renault) llega a Rusia después de su primera toma de contacto, en Alabama (Estados Unidos), con la Fórmula Indy. Que se hará efectiva al cien por cien el último fin de semana de mayo, en el que Fernando disputará las 500 Millas de Indianápolis.

Alonso, de 35 años y con 32 victorias en la categoría reina del motor, entre ellas dos en el Gran Premio de Mónaco -casualmente el que se saltará este año-, sorprendió antes del último, el de China, al anunciar que competirá en el mítico óvalo de Indiana, apuntando a la Triple Corona. Que incluye también las 24 Horas de Le Mans (Francia), que pretende disputar en un futuro.

Aspiración que de forma implícita indica que un tercer título mundial no llegará, al menos, este curso. En el que el ovetense lleva dos abandonos y un decimocuarto puesto.

Vettel, que lidera con 68 puntos, siete más que Hamilton y con treinta ya sobre el sustituto de Rosberg en Mercedes, el finlandés Valtteri Bottas -tercero, con cuatro más que su compatriota Kimi Räikkönen (Ferrari)- buscará su triunfo 45 en F1. Que sería el primero en Rusia. Donde hace dos años, en la campaña de su debut, el español Carlos Sainz (Toro Rosso) protagonizó el gran susto, al accidentarse espectacularmente en los ensayos libres. Por fortuna, sin mayores consecuencias.

El talentoso piloto madrileño -hijo del doble campeón mundial de rallys de idéntico nombre- que fue octavo en Australia y séptimo en Bahrein, antes de retirarse en Shangái, es noveno en el Mundial, con diez puntos. Y buscará puntuar de nuevo en Sochi, donde afrontará una sanción de tres puestos en parrilla, debido al incidente con el debutante canadiense Lance Stroll (Williams) en China.

Sainz, de 22 años, tiene cuatro puntos menos que el mexicano Sergio Pérez (Force India), de 27, que es noveno en el certamen; y que, con dos séptimos y un noveno, buscará puntuar de nuevo en la pista en la que en 2015 logró el quinto de sus siete podios en Fórmula Uno.

Suplementos digitales