Cientos de aficionados caminan por los alrededores del estadio Olímpico Atahualpa. Foto: Martha Córdova / EL COMERCIO
De a poco se llenan las gradas del estadio Olímpico Atahualpa. Desde las 14:30 los graderíos del coloso de El Batán se fueron pintando de amarillo.
En la puerta de ingreso, los miembros de la Policía Nacional realizaron requisas a los hinchas que ingresaban al estadio.
No se permitía el ingreso de elemento que puedan causar daños como astas de las banderas, tampoco botellas de cristal.
Cada aficionado ingresaba, además de su boleto y su camiseta amarilla, con ponchos para protección de la lluvia. Los costos iban de USD 1 a USD 3.
En el interior, los acomodadores guiaban a los aficionados para ubicarse en el lugar que indicaba los boletos.
Pasadas las 14:30 empezaron a llegar varias personalidades como el extenista Nicolás Lapentti, hoy presidente de la Federación Ecuatoriana de Tenis.