Los jugadores convocados por Gustavo Quinteros posaron con el nuevo uniforme para las eliminatorias sudamericanas en la Casa de la Selección, en la presentación de la camiseta oficial. Foto: Diego Pallero/ EL COMERCIO
Por primera vez, desde el proceso de Hernán Darío Gómez para el Mundial del 2002, no hubo foto oficial. Este fue un pedido especial del DT Gustavo Quinteros, quien expuso a la dirigencia de la Federación Ecuatoriana de Fútbol que no es partidario de este tipo de actividades.
Según Vinicio Luna, coordinador de la Tri, la FEF hizo la sugerencia, pero el cuerpo técnico no aceptó.
“Habrá que hablar con el presidente Luis Chiriboga, ya que tenemos contratos con los auspiciantes”, lamentó Luna.
El entrenamiento, que estaba previsto para las 15:30 en la Casa de la Selección, se reprogramó para la misma hora, pero en el estadio Atahualpa. Un grupo de policías custodió la seguridad de la Tri en el viaje en bus hasta el escenario de El Batán.
El objetivo es probar la cancha y que el DT haga los pedidos a los trabajadores de AFNA, que velan por el cuidado del gramado.
Además, un grupo de avanzada llegó al escenario deportivo con la utilería. Para ahorrar tiempo, los jugadores no entrarán al camerino y se cambiaran en la cancha.
Ya en el gramado, los futbolistas calentaron, estiraron e hicieron trabajos con balón. En un costado de la cancha, periodistas bolivianos analizaban los movimientos de la Tri y hacían sus reportes para sus respectivos medios.
Walter Ayoví, capitán de la Tri, aseguró que el grupo está tranquilo y bien anímicamente tras conseguir los primeros tres puntos. “Son dos partidos distintos con exigencias distintas. Vamos a trabajar pensando en las debilidades del rival y sobre todo en nuestras fortalezas”, indicó.