La insostenible crisis económica del Deportivo Cuenca se evidenció, en su máxima expresión, el pasado 30 de septiembre. Ese día, los dirigentes tuvieron que buscar desesperadamente fondos para que la plantilla viajase a Riobamba para jugar ante Olmedo.
Los futbolistas se resistían a hacer el viaje, si no se cancelaban sus sueldos. Fueron horas de incertidumbre y angustia en el complejo de Patamarca. Finalmente, la dirigencia consiguió USD 60 000 para depositar el dinero en las cuentas de los futbolistas.
El presidente del equipo, Hermes López, contó que el rol de pago mensual del equipo es de USD 152 000, que comprende salarios de 73 personas, entre jugadores, cuerpo técnico y personal administrativo.
Deportivo Cuenca adeuda tres meses de sueldo y requiere USD 456 000 para estar al día en los pagos. También hay más de USD 100 000 por pagar por reclamos de exjugadores y extécnicos, según la dirigencia.
El problema del equipo es estructural. Los acreedores presionan semana a semana por su dinero, lo mismo que la plantilla de jugadores y el cuerpo técnico. Cuenca tiene deudas importantes con instituciones como Servicio de Rentas Internas y el Instituto de Seguridad Social. Con el SRI, la deuda alcanza los USD 818 738 por las retenciones a los jugadores que no se pagaron de los años 2008 y 2012. Aún se desconoce el monto del 2013.
Por este motivo, el SRI se incautó de la taquilla del partido entre el cuadro morlaco y el Barcelona, jugado el 21 de septiembre en el estadio Alejandro Serrano Aguilar, que dejó una recaudación neta para el equipo de USD 92 000. Ese dinero fue retenido por Rentas como garantía de la deuda que mantiene el equipo.
En agosto pasado, con el propósito de garantizar el pago de la deuda, el SRI solicitó a la Ecuafútbol y a la Asociación de Fútbol del Azuay (AFA) la retención de todos los ingresos que genere o vayan destinados al Deportivo Cuenca.
Por eso, el club no ha recibido un solo dólar por las taquillas de los últimos cuatro partidos de local (U. Católica, Dep. Quito, Barcelona y Mushuc Runa).
Problemas con el complejo
El complejo de Patamarca está prendado por el IEES por una deuda de USD 500 000.
Si el club, en los próximos días, cubre un monto superior a los USD 200 000 se puede hacer un nuevo acuerdo para cancelar el resto en cuotas, en los próximos siete años.
La dirigencia lanzó una campaña para evitar el posible remate del predio, cuya área es de 29 000 metros cuadrados y tiene un avalúo de 1, 5 millones.
La cruzada consiste en vender un metro cuadrado de terreno en USD 100. La dirigencia esperaba cubrir un monto de USD 2 millones. Pero, hasta el viernes pasado, solo 40 hinchas respondieron al llamado y colaboraron para la compra de un metro cuadrado.
Fernando Andrade, directivo, cuenta que para cada movilización del plantel necesitan USD 25 000. Una concentración entre USD 3 000 y 4 000, hay que comprar la comida, pagar de la limpieza y el club no tiene ingresos. “Los bolsillos de los dirigentes tienen un límite”.
El directivo Andrade confirmó que la deuda actual es de alrededor de USD 3 millones.
El conjunto colorado no puede ofrecer como garantía el monto de los derechos de televisión del 2015 porque su permanencia en la Serie A no está garantiza todavía. Por ello, el equipo cuencano pelea por no bajar de categoría.