Como todos los componentes automovilísticos, los neumáticos también son objeto de permanentes innovaciones y mejoras por parte de los fabricantes.
En años recientes, grandes inversiones en investigación y desarrollo han permitido a las marcas más reconocidas desarrollar nuevos componentes que no solo permiten elevar los estándares de desempeño y seguridad, sino que también son menos contaminantes tanto en los procesos de fabricación como en los de reciclaje.
En lo referente a la utilidad, las nuevas líneas de llantas ofrecen ventajas tales como mejor desempeño sobre piso mojado, menores distancias de frenado, mayor durabilidad, resistencia a golpes, etc.
Además, estos compuestos combinados con nuevos diseños de la banda de rodamiento derivan en una menor resistencia al avance, lo cual se traduce en un consumo de combustible inferior.
En la red social YouTube, varios fabricantes de neumáticos tienen videos de pruebas realizadas a vehículos idénticos con diferentes neumáticos, donde ponen en evidencia las bondades de los productos que ofertan.
En el caso citado, se puede ver cómo dos vehículos iguales, calzados con diferentes neumáticos, son puestos a rodar por efecto de la inercia en superficies ligeramente inclinadas y el vehículo con las llantas de nueva tecnología se desplaza varios metros más.
Las líneas de neumáticos que incorporan estas tecnologías ya están disponibles en el mercado y gozan de buena aceptación por parte de los consumidores.
Como parte de los esfuerzos para reducir el peso de los vehículos y con ello el consumo de combustible, los fabricantes están extendiendo el uso de neumáticos tipo Run flat, que son aquellos que cuando se pinchan permiten rodar 80 kilómetros a una velocidad de hasta 80 km/h, eliminando así el uso de la rueda de emergencia.
Otra innovación en vehículos de gama alta es la incorporación de sensores que envían información al panel de instrumentos sobre una incorrecta presión de aire en los neumáticos.