El ingeniero Ferdinand Porsche (izq.) durante las reuniones de presentación del Escarabajo con el caudillo alemán Adolfo Hitler.
La historia de Volkswagen se remonta a 1930 cuando, en Alemania, se inició un proyecto para la construcción de un automóvil que fuera para el pueblo, denominado ‘Volks Wagen’.
Ferdinand Porsche fue el encargado de dirigir este trabajo, que más tarde fue potenciado por Adolfo Hitler durante su mandato. La premisa fue desarrollar un vehículo que compitiese con los ofertados por las industrias francesa e inglesa y que fuera asequible para todos los alemanes. Para cumplir con este objetivo, el proyecto recibió el apoyo gubernamental, incluso, con la construcción de una fábrica en la que se pudiese producir el modelo.
Los objetivos eran claros, el auto debía tener espacio para cuatro personas, disponer de un motor refrigerado por aire con un consumo de 7 l/100 km y alcanzar los 100 km/h. Tras varias pruebas y muchas modificaciones se llegó al Serie 38, en 1938, que fue aprobado por Hitler. De esta forma nació el Kdf-Wagen o más conocido como Escarabajo o Beetle. Pero, ¿fue este el primer vehículo Volkswagen?
La Asociación Alemana de Fabricantes de Autos (RDA) fue la encargada de contratar a Porsche para desarrollar este nuevo vehículo, que fue financiado por el estado alemán.
Ferdinad Porsche trabajaba desarrollando prototipos para diversas compañías, entre las que estaba NSU, una filial de Fiat en esos años.
El gobierno nazi le propuso a Porsche trabajar en el proyecto que se había trazado para dar a su pueblo un vehículo económico y veloz para que se movilizara la población.
Tres años después de que se detuviera la producción del Standard Superior empezó la comercialización del
‘Escarabajo’.
El Beetle se ha convertido en uno de los vehículos más icónicos de la industria automovilística en el mundo y uno de los modelos más vendidos en todo el planeta.
En la actualidad solo existe un ejemplar del Standard Superior. En ocasiones es exhibido como uno de los autos más clásicos.
Años atrás, en 1923, el ingeniero judío Josef Ganz ya había trabajado en un vehículo económico y veloz, denominado Ganz-Klein-Wagen. Este auto incorporaba un motor central, formas aerodinámicas en su diseño y suspensiones independientes en las ruedas, algo muy diferente a lo que se realizaba en aquel tiempo.
Diez años después, Ganz presentó el Standard Superior en el Salón del Automóvil de Berlín de 1933.
Este fue el tercer prototipo que el ingeniero quiso popularizar, pues sus dos versiones no llegaron a consolidarse en el mercado.
No obstante, la calidad de este experto en el desarrollo de vehículos hizo que la versión anterior al Standard Superior, el Maikäfer, fuera probado por Porsche, ingenieros de Daimler-Benz y de Bayerische Motoren Werke, empresas a las que prestara sus servicios como consultor.
El Standard Superior tenía un diseño muy avanzado para la época y, por sobre todo, adelantaba las líneas que más adelante se pudieron observar en el ‘Escarabajo’.
También compartieron el mismo sistema de suspensión. Aunque nunca fue oficial que este haya sido el primer modelo de Volkswagen, debido a que su creador era judío, según cuenta el libro: ‘La extraordinaria vida de Josef Ganz, el judío detrás del Volkswagen de Hitler’, este habría sido el que inspiró a la creación del Beetle en varios aspectos.
En 1935 se detuvo el proceso de producción del Standard Superior debido a la intervención de los nazis en la economía alemana. En la actualidad, solo queda un ejemplar de este vehículo que hizo parte de la historia automovilística alemana.
Tres años más tarde se empezó a comercializar el que sería, durante mucho tiempo, uno de los modelos más vendidos y míticos en todo el mundo, el ‘Escarabajo’. Incluso en la actualidad es un auto muy codiciado en los mercados internacionales gracias a su prestigio.
Fuente: www.jalopnik.com