Unos 2 500 manifestantes contrarios a la realización del Mundial de fútbol de Brasil 2014 ocuparon hoy, 27 de mayo, las principales avenidas de Brasilia, en los alrededores del estadio Nacional, y provocaron la suspensión de las visitas a la exhibición en la que se muestra la Copa que será entregada al campeón.
En la marcha ‘antimundial’ participaron militantes del Movimiento de los Sin Techo y unos 300 indígenas que horas antes realizaron una manifestación delante del Congreso en demanda de cambios en el modelo económico.
Unos 500 efectivos de la policía militarizada fueron desplazados para enfrentar la protesta y lanzaron bombas de gas lacrimógeno para impedir a los manifestantes acercarse al estadio.
Un grupo de indígenas reaccionó lanzando piedras y trozos de madera contra los agentes. Pese a que no hubo registro inmediato de heridos, la protesta generó un caos de tránsito en Brasilia, a raíz de la ocupación del Eje Monumental, la principal avenida de la capital federal brasileña.
A raíz de la manifestación y ante las precarias condiciones de seguridad, los organizadores de la gira de la Copa Mundial por Brasil decidieron suspender las visitas al trofeo.