Las recientes declaraciones del siempre locuaz Hernán Darío Gómez, en las que dio a entender que en Ecuador le impusieron jugadores cuando dirigió a la Tricolor, han dejado pasmados a muchos. Según EL COMERCIO, ‘Bolillo’ dijo esto literalmente: “Tuve más problemas en Ecuador en ese aspecto que en el mismo Colombia. En Ecuador, por ejemplo, yo pasaba mi lista de 15 y a veces me hablaban de jugadores. Aquí están mis 15 y después les pasaba la lista; aquí están los 25, ¿y cómo así que los 25?, los 15 míos y los 10 suyos”. Esto lo dijo en una charla con Antena 2, cuando afirmaba que nunca recibió imposiciones en la selección de Colombia. Esto amerita unas primeras reflexiones.
1. ¡Wow! Sin querer queriendo, casi de pasada, como si nada, el ‘Bolillo’ terminó aceptando que algunos de los jugadores que convocaba cuando estaba al mando de la Tricolor no eran de su preferencia. Lastimosamente, no aclaró a quién o quiénes presentaba la lista de jugadores, y tampoco dijo quién era el que se la devolvía completa. Tampoco dice cuántas veces sucedió esto entre 1999 y el 2004. Quizás nunca lo haga. Pero al menos, en primera instancia, revela que este entrenador, que llegó al país con el prestigio de haber sido parte del histórico proceso mundialista colombiano de los 90, estaba dispuesto a que le digiten jugadores para conservar su puesto. Quizás el ‘Bolillo’ resultó más práctico de lo que se pensaba. Pero yo no veo a Edgardo Bauza ni a Marcelo Bielsa, por ejemplo, dejándose imponer un jugador, ¡peor una decena!
2. Es verdad que, en muchos clubes, los jugadores llegan primero y luego se contrata al entrenador, que tiene que manejar lo que hay. También es verdad que existen directivos que meten mano en las alineaciones y hasta en los cambios. Eso no es corrupción necesariamente: hay una inversión que el dirigente necesita recuperar. Muchas veces, los dirigentes exigen que un delantero sea alineado a como de lugar porque hay ‘scouts’ atentos. Y otras veces, el dirigente se cree entrenador. Jesús Gil y Gil, el gran líder del Atlético de Madrid, se jactaba de eso. Bueno, así son algunos clubes, aquí y en el exterior. Pero que eso suceda ¡en una Selección Nacional! es un abuso. La razón: se trata de un combinado que representa oficialmente a un país y que no necesita recuperar ninguna inversión porque no es dueña de los derechos de los jugadores. Su participación es netamente deportiva. Obviamente que brillar en la Tricolor es una vitrina que puede catapultar un excelente negocio para los dueños de los derechos deportivos de un jugador. De hecho, un Mundial siempre genera una ola de traspasos a Europa en beneficio de los que jugaron bien; pero el criterio para incluir o descartar jugadores en una lista nacional siempre debería ser técnico y no por la posibilidad de un negocio que, en rigor, no es de incumbencia de la Federación. Una vez más, yo no veo a Bauza dejándose meter una buseta de jugadores por cada partido.
3. ¿Por qué ‘Bolillo’ aceptó dejarse imponer tantos jugadores? Por sus declaraciones, se deduce que ‘Bolillo’ siempre tenía al menos en mente un equipo titular. Los que llegaron por la vía de la ‘recomendación’ deben haber sido los que comieron banca pero que se beneficiaron de agregar en su currículum el hecho de ser tomados en cuenta. La columna vertebral del equipo del ‘Bolillo’ fue integrada por José Francisco Cevallos, Iván Hurtado, Edwin Tenorio, Álex Aguinaga, Édison Méndez y Agustín Delgado. Con ellos en la cancha y en buen estado, era posible que ‘Bolillo’ tuviera un margen para aceptar ‘sugerencias’, pues el equipo no sufría mucho, sobre todo en Quito, si estos seis legendarios futbolsitas estaban de titulares. Por supuesto, esto es una especulación, pues el dicharachero entrenador no dijo cuáles jugadores fueron impuestos. Pero yo no creo que estos seis hayan sido digitados desde arriba.
4. ¿Qué vendrá? Lo más probable es que la cúpula de la Ecuafútbol intente minimizar el tema y lo niegue todo. ‘Bolillo’ no tiene pruebas. Pero quizá no sea tan fácil evadir la discusión. La impopularidad de los dirigentes entre la hinchada es tan alta, que casi nadie los defiende en las redes sociales, donde los usuarios imaginan que la entidad ha manipulado las convocatorias para beneficiar a alguien. La gente se hace estas preguntas: ¿A quién le daba el ‘Bolillo’ la lista de 15 jugadores? ¿Quién se la regresaba completa con 25? ¿Eso también pasó en la nómina mundialista del 2002? Sería demoledor para el prestigio de la Ecuafútbol que un jugador haya sido llevado a Japón por una imposición. Hay otra pregunta: ¿Lo mismo pasó con Suárez, Vizuete y Rueda?
5. La Ecuafútbol sufre una nueva polémica en apenas tres meses, en los que generó escándalo por la votación que dio vía libre al Canal del Fútbol, no logró atajar la primera huelga de árbitros de la historia del país, mantiene una dura pugna con Liga (el equipo ecuatoriano más respetado en el exterior) y no puede gestionar un amistoso razonable para la Tricolor. Lío tras lío. Error tras error. Es el trimestre más conflictivo del presidente Luis Chiriboga desde la eliminación al Mundial del 2010. El directivo necesita con urgencia un triunfo de Ecuador. Lástima que el cotejo con Argentina esté tan lejos.