El expiloto brasileño de Fórmula 1 Rubens Barrichello, fue uno de los seis corredores de autos que terminó este jueves el programa de entrenamiento de novatos para competir en las 500 millas de Indianápolis en el famoso óvalo de esa ciudad estadounidense.
Barrichello, el también veterano piloto mexicano Michel Jourdain, el británico James Jakes, el francés Simon Pagenaud y los estadounidenses Josef Newgarden y Bryan Clauson completaron sin incidentes la prueba de 40 vueltas y están habilitados para iniciar las prácticas y la clasificación a la gran carrera del 27 de mayo próximo.
Jourdain, de 35 años y quien corrió por última vez en la Indy-500 en 1996, completó su prueba de velocidad en un intento por regresar al circuito de monoplazas estadounidense.
El francés Jean Alesi, a punto de cumplir 48 años y con más de 200 salidas en la F1, y el neozelandés Wade Cunningham, completaron dos de las tres fases y tratarán de terminar el viernes el programa de entrenamiento.
El programa permite a los nuevos corredores en la Indy-500 adaptarse al reto de alcanzar consistentemente velocidades superiores a las 200 millas por hora (321,868 km/h) en el óvalo de 4 km de Indianápolis.
Para ello deben dar un mínimo de 15 vueltas por encima de las 210 mph (337.962 km/h) para completar el programa.
“Te permite avanzar gradualmente sin demasiada presión, así que estaba a gusto con mi coche y todo el proceso”, dijo Barrichello. “En general, tuve un día muy exitoso”.
Barrichello ha sido el piloto que más tiempo ha corrido en la F1, en la que archivó dos vicecampeonatos (2002 y 2004) y acumuló 11 victorias, 14 poles y 68 podios en los 323 grandes premios que disputó.
El inglés James Jakes hizo la vuelta rápida del día en 41,2338 segundos, 218,268 m/h (351,268 km/h), en un coche impulsado por motor Honda. El pasado año el europeo falló en clasificarse a la Indy-500. Jourdain, un veterano competidor en los circuitos estadounidenses, desde la desaparecida Serie CART hasta la Nascar, anda en una carrera contra reloj para conseguir una plaza en el equipo Rahal-Letterman.
“Ha sido fantástico. Estaba pensando en el coche mientras hacía las vueltas: ‘Esto es muy divertido’. No voy a decir que parece que fue ayer que yo estaba aquí, pero no se siente como hace 16 años”, declaró Jourdain.
“Pensé que iba a ser mucho más nervioso, pero se sentía muy bien. Yo estaba muy cómodo y relajado. Me sentí como en casa en el coche y estoy muy, muy feliz”, añadió el volante mexicano, que a los 19 años se convirtió en el piloto más joven en correr la ChampCar y Indy 500.