Al Seguro de Salud Individual y Familiar, a través de unidades médicas propias y externas, le corresponde atender los requerimientos de salud de los usuarios del IESS; actualmente, el servicio en algo se ha superado -se han tomado medidas: implantación de sistemas informáticos, incremento de prestadores externos, entre otras-, pero aún subsisten los reclamos por citas no obtenidas, tratamientos inadecuados, carencia de medicamentos, etc.
El servicio de salud del IESS debe mejorar; olvidémonos de soluciones parches, como aquella de contratar entes privados para que “den haciendo” y continúen las falencias; el asunto es de fondo, como lo he manifestado en reuniones de trabajo con funcionarios del IESS, además de mantener roces de gestión con la correspondiente Dirección Provincial del IESS, son dependencias de estructuras mínimas y escaso personal que, como tales, no guardan coherencia con las funciones que regionalmente les corresponden, lo que ha ocasionado que no siempre se cumplan en su totalidad con tareas tales como pago oportuno de prestadores externos; controles al desempeño de los servicios que prestan unidades médicas internas y privadas; supervisión a la gestión del personal médico, paramédico y administrativo; evaluación de la infraestructura, del equipo y maquinaria; etc. Dada la vital importancia de la salud, convendría que las autoridades del IESS, en función de lo dicho, tomen cartas en el asunto y procedan a la debida reestructuración, con personal suficiente e idóneo.