En mayo del 2011 en la vía Intervalles un conductor en completo estado de ebriedad impactó mi vehículo invadiendo vía, rebasando en curva, sin documentos de conducir ni de su vehículo. Revisando el historial ya poseía un largo historial por conducción en estado etílico.
El conductor irresponsable nunca apareció y presenté una demanda personal a la Fiscalía, finalmente el día 9 de noviembre del 2011 estando todas las partes involucradas se realizo la audiencia. Mi interés era recuperar todo lo que había invertido en arreglar mi automóvil. Una vez terminada la audiencia el señor juez tuvo que dictaminar la sentencia de culpabilidad para este irresponsable, pero se reservó dar el dictamen en cinco días, lo cual no sucedió hasta después de 21 días. La sentencia salió y el señor juez dictaminó que el conductor debía pagar solamente la cuarta parte de lo que he gastado así es que el que salió pagando la borrachera fui yo. Ya no soy político, y en mi opinión en lo único que le doy la razón al señor Correa es que la Justicia necesita de magistrados idóneos e inteligentes en los cuales se pueda confiar. Mi última esperanza es que los flamantes miembros de la CNJ puedan poner orden en una Justicia que solo existe de nombre.