La Asamblea Nacional aprobó el 21 de junio la “Ley Orgánica para el Fomento Productivo, Atracción de inversiones, Generación de empleo y Estabilidad y Equilibrio fiscal” con carácter de económico urgente, que en síntesis, busca sacar a flote la devastada economía con la inmediata y directa aplicación de una amalgama de medidas macro fiscales a corto y mediano plazo, también contiene varios incentivos de carácter estrictamente tributarios. Se trata de una ley necesaria y dinámica para el Estado, sin embargo, hay oscuridad en su art. 42, en el que reforma el art. 124 del Código de Planificación y Finanzas Públicas donde se determina el límite legal de endeudamiento público hasta el 40% del PIB.
La Ley para el Fomento Productivo aprobada, faculta la inaplicación por el periodo de hasta tres años del techo o límite legal de endeudamiento del 40% del PIB, otorgando al Ministerio de Finanzas la capacidad discrecional para adquirir nuevos compromisos financieros con instituciones financieras internacionales, que producirán el aumento de la deuda pública, hasta “alcanzar el equilibrio fiscal primario”. Esperemos que sea del todo positiva y transparente la gestión del flamante Ministro de Finanzas, y que el cheque en blanco para adquirir nueva deuda sea utilizado positivamente.