Con indignación y tristeza recibí la noticia de que un deportista más en bicicleta había fallecido atropellado por un vehículo, cuando todos sabemos que las autoridades están ahí en sus puestos de trabajo para precautelar la vida de los seres humanos, será acaso necesario que uno de nuestros hijos sufran este tipo de accidentes de tránsito para después pedir justicia, cuando todos conocemos los sitios públicos ideales que sirven para prevenir accidentes y que se pueden habilitar con el mínimo costo financiero y así nos evitaríamos más desgracias personales que lamentar. Las pistas de antiguo Aeropuerto Mariscal Sucre por qué no las pueden utilizar para estos fines de inmediato. Esperamos acaso miles de muertos para recién recapacitar. Por andar en bici ¡carajo!