A propósito de un artículo de María Josefa Coronel publicado en el diario Expreso el 8 de febrero con el nombre de “Un triunfo que merece cuidado” manifiesta que el grupo Alfaro Vive, “al son de no gustarles el sistema jurídico vigente, se alzaron en armas, secuestraron y asesinaron libremente, eligieron violar los derechos humanos de la sociedad…” . Las posiciones de algunos asambleístas pesadamente identificados nos botan un tufo de ese correismo maltrecho que acabó con el respeto a la Constitución por doquier, empezando porque el ex Presidente, abdicó de jurar ante esta, o sea ante la voluntad democrática del pueblo ecuatoriano. El arte de la traición, ese que practicó Joseph Fouché, fue precisamente eso, el arte de su interés, el autocratismo, al diablo los estamentos de la ciudadanía, la civilidad. Primero yo, segundo yo y tercero yo: Incivilidad. Por eso el Presidente Moreno debe ser muy cuidadoso “Dormir con el un ojo abierto”, la traición, ahora más que nunca, puede cernirse en Carondelet. Hay que apoyar al Presidente, pero a su vez esperamos de él, un ajustar de la firmeza que hasta ahora ha demostrado. ¡El bien prevalecerá sobre los vándalos!