La dolarización

Me alegra leer el artículo del abogado León Roldós Aguilera, publicado el miércoles 2 de septiembre, “Sí la dolarización, pero..:”, pues glosa las declaraciones prejuiciadas que emite el presidente Correa, enemigo acérrimo de la dolarización, pero que la soporta como “mal necesario” por una sola razón: que el dólar es más popular que Correa, y el Presidente sabe que el momento en que desdolarice se armaría el caos en Ecuador.

Y digo que me alegra la actitud del abogado Roldós, pues el año 2000 cuando él y yo actuábamos como diputados, y el Congreso debatía dicho proyecto, él era un opositor encarnizado de la dolarización por razones meramente ideológicas, mientras yo la defendía como la tabla de salvación para evitar que el Titanic naufrague, según el lóbrego vaticinio de Jamil Mahuad.

Hoy, 15 años después está probado que la dolarización no ha podido ser vencida por Correa. Es casi un milagro que haya sobrevivido al terremoto correísta, pese a todas las bombas de tiempo colocadas por el propio Gobierno, buscando afectarla. El dólar se ha mostrado invulnerable hasta hoy, pues ha contribuido a elevar el nivel de vida de todos.  

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