Analizando la geopolítica mundial referente a la paz y su producto final, el “resentimiento social”, no se debe dejar de recordar hechos que han marcado la historia y entre otros me refiero a las grandes potencias mundiales representada en su época por Tony Blair, Bush Jr. y Aznar en que pedir disculpas y perdón no fue suficiente por el lanzamiento de una sangrienta e inmoral invasión a Irak en una aventura bélica que tanto daño y destrucción hizo y sigue haciendo a la humanidad. El motivo final: petróleo. La información que recibieron fue errónea, la inteligencia militar fue manipulada y de manera irresponsable no dimensionaron lo que venía luego de la invasión y dieron pobres explicaciones frente a tanta muerte inútil. Existe un informe llamado “Chilcot” presidida por Sir John Chilcot donde además afirma que no agotaron las alternativas pacíficas y que el ISIS y otros grupos violentos pueden haber surgido como resultado de esta guerra. No justifico ningún rastro de violencia pero tampoco pueden analizar y opinar los hechos unilateralmente.
Este comentario lo realizo sin temor como tienen muchos comentaristas o ex diplomáticos nuestros en opinar temas complejos por miedo a perder sus favores, visas y más, viajo constantemente por esos lares y no me cohíbo de expresar y sugerir cambios en la visión general del mundo, estamos en un fatal proceso de desangre. Estos hechos dolorosos, han ocasionado el deterioro de la ONU y otros organismos que son incapaces de velar la paz por “solidaridad hipócrita” con el “poder económico”. El honor y el dolor son similares para todos, sin excepciones. Meditemos profundamente.