Una fecha como hoy, hace 73 años, Sangolquí -parroquia rural de Quito- fue elevada a la categoría de cantón con el nombre de Rumiñahui.
Un visionario grupo de hombres y mujeres sangolquileños se organizaron con este fin. El sueño se torna en realidad el 31 de mayo de 1938, cuando el entonces General Alberto Enríquez Gallo, Jefe Supremo del Ecuador, mediante Decreto Supremo eleva al rango de cantón; reconociendo además como parroquias urbanas a: Sangolquí y San Rafael y como rurales a: San Pedro de Taboada, Cotogchoa y Rumipamba.
Rumiñahui, incrustado en pleno corazón del valle de Los Chillos, dotado de encantos naturales como su paradisíaco clima, su paisaje único, aguas termales y, lo que es más valioso, un pueblo amable y con mística de trabajo, es hoy uno de los cantones más progresistas de la Patria, pese a ser uno de los más pequeños geográficamente.
Su gran crecimiento demográfico, sin embargo, ha desvelado la falta de planificación futurista, afronta graves dificultades en la vialidad y movilidad, así como de servicios básicos y cuidados del medioambiente.