El guapo de la barra

Lo que otros callan por temor o timidez, aquí se lo dice sin anestesia. Es comentarista de fútbol de EL COMERCIO.

Alejandro Ribadeneira

Licenciado en Comunicación Social por la Universidad Central. Es periodista desde 1994. Colabora con el Grupo El Comercio desde el 2000 y se ha desempeñado en diversos puestos desde entonces. Actualmente ocupa el cargo de Editor Vida Privada.

Miller a China: 4 razones para considerarlo un craso error

Fichar por el Changchun Yatai no es precisamente lo que un crack como Miller Bolaños aspira. Nadie dice: "¡Wow, me voy al Yatai!”. Pero el goleador del campeonato 2015 y del tricampeón Emelec ha escogido seguir su carrera en Oriente Extremo. Estas son las razones para lamentarlo:

1. Miller se convertirá en un fantasma
El ejemplo de Joffre Guerrón debió enseñarle lo enormemente perjudicial que resulta irse a una liga tan lejana como la china. Sí, hay internet, WhatsApp y esas cosas que acortan las distancias, pero no es lo mismo. Guerrón tardó en despabilarse y pudo irse a México para reflotar su carrera deportiva aunque salió para siempre del radar de los entrenadores de la Tricolor. Quizás Miller pueda permanecer en la mente y el corazón de Gustavo Quinteros, después de todo ha sido parte de su eje táctico, tanto en los malos momentos como en estos de gloria; pero el riesgo es alto. El mismo Quinteros lamentó la decisión.

2. Miller tendrá menos competitividad
El Changchun Yatai no está en buen momento (fue campeón en 2007) pero ese no es el punto. La Superliga China atraviesa una fase de intenso gasto en figuras y es la segunda del mundo (sí, del mundo) en inversión en este período de pases, así que se espera que el nivel de la competición mejore. No obstante, tardará un poco de tiempo en que ese torneo realmente alcance los estándares de exigencia de México, Brasil o Turquía. Los varones chinos, la materia prima de los clubes, no han logrado mejorar y cada vez lo hacen peor. Es raro, pero este deporte le genera muchos problemas a una nación que ha triunfado en alcanzar la excelencia en otros ámbitos.

3. Miller pondrá a prueba su carácter
El talento deportivo no se le discute a Miller. Pero adaptarse a China es arduo. Muchos jugadores, sobre todo los latinos, aguantan seis meses y luego huyen. La comida, las tradiciones y la soledad, a veces intensa, los mina. Los devora. Miller vivirá en Changchun, ciudad de Manchuria, fría de clima (por algo fue sede de los Juegos Asiáticos de Invierno de 2007) con un promedio anual de 8 grados centígrados. Quizás para él hubiera sido mejor una ciudad más cosmopolita, que no ponga tanta presión a su paciencia. Bueno, todo depende del punto de vista y de cada uno, por supuesto; pero Miller hubiera estado más cómodo en un país latino. ¡Ah!, el entrenador es chino.

4. Miller se presionará por el país
De entrada, pensar que el mejor jugador del campeonato y uno de los titulares de la Tricolor ficha por el Changchun Yatai genera malestar, dudas, escozor. Es que el destino de alguien de su rendimiento era México, por lo menos. Miller ni siquiera va a un ‘grande’ sino a un club secundario. Si eso le pasa al mejor, ¿qué pueden esperar los demás? ¿Singapur? ¿India? Por eso, Miller ahora está presionado para ser el mejor del equipo, la estrella, el referente. Si no tiene éxito, será un duro golpe para los que vienen atrás.