El modelo utilizado para estudiar un posible apocalipsis zombie fue el mismo que se usa para distintos tipos de brotes de enfermedades contagiosas.

El modelo utilizado para estudiar un posible apocalipsis zombie fue el mismo que se usa para distintos tipos de brotes de enfermedades contagiosas.

¿Hacia dónde deberías escapar en caso de un apocalipsis zombie? Esto es lo que dicen los científicos

El modelo utilizado para estudiar un posible apocalipsis zombie fue el mismo que se usa para distintos tipos de brotes de enfermedades contagiosas. Foto: Facebook / 28 Days Later

Aunque parezca insólito, los apocalipsis zombies cautivan no solo al público que consume entretenimiento, sino también a epidemiólogos en el área académica. Investigadores de la Universidad de Cornell hicieron un modelo de cómo se esparciría esta epidemia por los Estados Unidos y cuáles serían las mejores maneras de ponerse a salvo.

Los resultados de esta investigación fueron publicados en la revista American Physical Society. El modelo utilizado para estudiar un posible apocalipsis zombie fue el mismo que se usa para distintos tipos de brotes de enfermedades contagiosas.

Según menciona el estudio liderado por Alexander Alemi, quienes viven en las grandes ciudades están perdidos y es muy probable que no logren luchar contra las hordas de millones de zombies que vendrían a atacarlos. El investigador asegura en un boletín de EurekAlert que Nueva York, con una población metropolitana de 22 millones de habitantes, “caería en un solo día, mientras que en las afueras del estado, las personas tendrán alrededor de un mes para prepararse”.

Entonces, la primera recomendación en caso de un hipotético apocalipsis zombie sería salir de la ciudad en ese momento, aunque habría que tener mucho cuidado con las aglomeraciones de millones de personas intentando abandonar el sitio al mismo tiempo que tú.

Los investigadores hacen algunas suposiciones; que habría un colapso de tráfico en las vías, pues todos quienes tengan un auto estarían intentando salir de las ciudades principales. De igual manera, los aeropuertos rebasarían su capacidad.

En un lapso de 28 días (sí, como la película ’28 días después’), las grandes ciudades se hacen más seguras, pues los zombies ya las habrían abandonado poco a poco en busca de humanos a quienes infectar. Mientras tanto, las áreas que rodean a la gran urbe comenzarían a volverse más peligrosas.

Si tomamos este modelo y lo trasladamos a Ecuador, significaría que Quito entero caería en muy poco tiempo. En lugares aledaños, pero menos poblados, como el Valle de los Chillos o Tumbaco, la epidemia tardaría más en llegar. Pero estos sectores se volverán riesgosos una vez que los zombies de la ciudad comiencen a abrirse paso.

La recomendación de los investigadores es moverse a lugares con poca población y de difícil acceso. En el caso estadounidense, ponen como ejemplo las Montañas Rocosas (EE.UU. y Canadá). En Ecuador aplicaría para sectores inaccesibles de la Cordillera de los Andes y, por qué no, las selvas tropicales de la Amazonía y la Costa. En definitiva, nuestro país está bendecido con varios posibles escondites.

Al igual que en las series de televisión, en el modelo desarrollado por los investigadores se asumen ciertas interacciones y se añaden elementos aleatorios. Es decir, un zombie bien podría morder e infectar a un humano, así como esa persona podría aniquilar al muerto viviente. Por supuesto, esto depende de las circunstancias en que se encuentre y las oportunidades que tenga a la mano.

Hay factores que no pueden ser asumidos de antemano, como la velocidad a la que se movilizan los zombies o su nivel de agresividad. Lo que sí se puede identificar es que el foco de infección no se daría en dos lugares al mismo tiempo. Tiene que surgir de una locación para abrirse paso a otras.

En base a esto, los epidemiólogos crearon una herramienta web donde es posible modificar variables como la frecuencia de las mordidas de muertos vivientes, así como el tiempo que le toma a un zombie caminar una milla. Allí se puede observar un mapa de Estados Unidos y cómo se propaga la infección según van pasando las horas.