Un empleado de Directv instala el servicio en una casa en el norte de Quito. La firma tiene el 36% del mercado. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
El servicio de suscripción de televisión pagada alcanzó en el Ecuador un pico de 31,6% de penetración en el 2015. Desde entonces, este negocio comenzó a perder fuerza en número de suscriptores. Para el 2016, la penetración bajó a 30,5% y en el primer semestre de este año descendió a 29,9%.
La competencia de empresas con ofertas de contenido en línea ha impactado en el sector, según analistas. Para competir, las operadoras de televisión pagada han aplicado dos estrategias: apostar a la renovación de sus contenidos y entrar a competir en el mercado de plataformas con contenidos en línea.
Uno de los actores en este mercado es la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT), con su producto CNT TV, que en el primer semestre de este año sumó 380 562 suscriptores.
Para competir con los contenidos en línea, la empresa estatal desarrolló la plataforma digital CNT Play, con 40 títulos de series. El servicio está disponible desde 2016 y a la fecha cuenta con más de 100 000 usuarios, indicó la empresa. A esta plataforma se puede acceder desde ordenadores, teléfonos inteligentes y tabletas.
En oferta de contenidos, CNT TV apuesta por programas deportivos. En marzo pasado la empresa estatal lanzó el canal CNT Sport, que incluye la transmisión del Campeonato Nacional de Fútbol.
Directv, la empresa de televisión pagada con mayor número de suscriptores (472 043) oferta Directv On Demand, plataforma con más de 1 000 títulos disponibles, entre películas, series, contenidos infantiles, entre otros. El servicio tiene costos mensuales que oscilan entre USD 54 y 98.
Otro de sus productos es Directv Play, que permite a los suscriptores consumir el contenido contratado en sus paquetes, bajo demanda y en ‘streaming’, sin costo adicional. El servicio también está disponible para dispositivos móviles.
Grupo TV Cable, tercero en el mercado, ofrece el servicio de TV Cable Play, una plataforma en línea con más de
10 000 títulos de contenidos bajo demanda, que pertenecen a 19 plataformas. Las principales son Fox, HBO y ESPN.
“El acceso es gratuito para todos los clientes suscritos a un plan de TV pago”, indicó Ronald Espina, gerente de mercadeo. No obstante, aclaró que la cantidad de contenido disponible depende del paquete contratado.
En esta empresa se puede acceder a TV Cable Play desde televisiones inteligentes y dispositivos móviles. Espina explicó que esto permite que los usuarios de un hogar puedan consumir al mismo tiempo diferentes contenidos, desde distintos dispositivos. “Este servicio complementa el de TV pagada. Disfrutar de contenidos de forma individual es la tendencia”, subrayó.
Espina se reservó la cantidad de usuarios que hacen uso de TV Cable Play, pero aseguró que el servicio crece entre un 15% y un 20% mensual.
Claro ofrece servicios de televisión por suscripción desde 2013, en la modalidad satelital y desde marzo del año pasado en cable. Los usuarios pueden acceder al contenido online de los canales de TV, a través de la plataforma Claro Play, que no tiene costo adicional.
La operadora también cuenta con el servicio Claro Video, que ofrece un catálogo de películas y series bajo demanda, al cual se puede acceder desde Smart TV, un computador, tabletas y smartphones. El precio de la suscripción mensual es de USD 6,39. También hay un plan semanal que puede ser renovado por USD 2,26.
Paúl Bernal, profesor en ingeniería en Telecomunicaciones de la Universidad de las Fuerzas Armadas, explica que entre las fortalezas de las empresas internacionales que ofertan contenidos en línea están los costos convenientes de los planes y la actualización de los contenidos. “La única forma de competir es con buena programación. El contenido es lo que aporta”.
Luis Pástor, gerente de Advance Consultora, coincide en que el fuerte de la competencia está en el contenido. Este investigador de mercados explicó que los proveedores de contenido y las propias operadoras están desarrollando productos exclusivos.