Redacción Quito
El congestionamiento del tránsito vehicular en las intersecciones, grandes avenidas y redondeles de Quito se incrementa en las horas que se realizan los cortes de energía eléctrica.
Ayer, en la avenida Occidental, a la altura de El Bosque, dos policías indicaban a los vehículos cuándo debían o no pasar. Con silbatos y las señas de sus manos dirigían el tránsito en sentido sur-norte, a las 08:25.
A esa hora, Augusto Cabezas se encontraba en la bajada de El Pinar Alto. Con desesperación miraba el reloj y la espalda del uniformado seguía impidiendo que la fila, en donde se ubicaba su vehículo, circulara.
Para Cabezas, los carros se acumulan demasiado en las avenidas y se tarda en llegar de una cuadra a otra varios minutos. “No sé si llevan un control del tiempo, pero deberían contabilizar los segundos como un semáforo. Eso evitaría tanta congestión”.
Sin embargo, según la Policía, el tiempo en que los uniformados permiten el paso de una intersección a otra depende del flujo de vehículos. Por lo que generalmente dejan que la mayor cantidad de autos circule por las calles principales. El tiempo promedio va de entre 30 a 40 segundos.
En cada intersección permaneces dos o tres policías ayudando a controlar los cruces. Pero en intersecciones grandes y redondeles la cantidad de uniformados aumenta a cinco o seis.
Por ejemplo, en sectores como La Mariscal o la avenida Colón, en el norte, se ubican dos policías para ayudar con la circulación en ambos sentidos. Mientras que en las avenidas República, 12 de Octubre, Naciones Unidas, De los Shirys, entre otras, el triple.
Adicionalmente, señalan que para efectuar una cobertura completa de las zonas, la Empresa Eléctrica les envía el registro de los cortes el día anterior. “Con esos datos nos ayudamos para organizarnos en los sectores que sufren cortes de luz”. En Quito, alrededor de 250 policías colaboran por período de corte y a escala nacional, 900.