En la planta de Audioelec, en Durán, se ensamblan los televisores marca Sony. Foto: Enrique Pesantes/EL COMERCIO
Gabriela Monrroy entró a uno de los locales de electrodomésticos de la Bahía, en el centro de Guayaquil, en busca de un televisor de 32 pulgadas con el precio más bajo.
Luego de cotizar varios modelos optó por un Riviera, de unos USD 500.
Monrroy desconocía que esta es una de las marcas de televisores que se ensamblan en el país desde el 2009, en la planta de Audioelec (Durán). “Busqué otras marcas conocidas, pero estaban más caras”.
La oferta de televisores ensamblados en el país no es nueva, comenzó en el 2008 con la creación de las partidas que permiten la importación de piezas y partes (CKD). No obstante, en los últimos años la participación en el mercado de este tipo de productos ha tomado fuerza porque la importación de televisores completos resulta más costosa.
“En el 2009 comenzaron a aplicarse salvaguardias cambiarias y de balanza de pagos, los televisores también fueron afectados y ahora nuevamente hay salvaguardias para televisores y piezas”, menciona Gabriela Uquillas, asesora aduanera de la Cámara de Comercio de Guayaquil.
Andrés Mata, representante de la Asociación de Almacenes de Electrodomésticos del Ecuador, sostiene que el 40% de los televisores que se venden actualmente en los locales comerciales se ensambla en Ecuador. Y añade que “la participación del televisor ensamblado ha ido creciendo, porque es de la misma calidad que el televisor de afuera”.
Sony y LG, dos de las marcas internacionales con mayor participación de mercado ecuatoriano, anunciaron este año que incrementan el número de televisores “made in Ecuador”.El objetivo es ofrecer precios más bajos en un escenario donde el nivel de consumo se ve amenazado por la coyuntura económica.
La empresa Audioelec, que produce en Guayaquil televisores de seis marcas: Riviera, Tekno, Innova, Diggio, Westinghouse y Sony, refleja la fuerza que ha tomado el ensamblaje de televisores en Ecuador.
En el 2009, cuando solo producían la marca Riviera, en la planta trabajaban 45 personas que producían unos 200 equipos al día. Actualmente, la empresa tiene 200 trabajadores y la producción en la planta aumentó a 2 500 diarios.
“Los precios de nuestros televisores de marcas como Riviera y Diggio son un 35% menores a los que tienen las marcas importadas que se venden en el mercado”, dice Antonio Haz, gerente de Audioelec.
Sony, que comenzó a ensamblar dos modelos en el 2012, anunció que subirá a nueve modelos, alcanzando un 80% de producto ensamblado en el país. Para el 2016 esperan dejar de importar televisores.
Jaime Mantilla, country Manager de Sony en Ecuador, explica que antes las partes y piezas de televisores tenían solo un 2,5% de arancel, pero este año se sumó un 25% de
salvaguardias. Aun así, ensamblar sigue siendo más barato, cuenta, porque un televisor terminado paga un 45% de salvaguardia además del arancel particular para cada tamaño. “Sí hay una diferencia importante en los precios de entre un 15% a 20%, dependiendo del modelo”, añade. El mes pasado, la firma coreana LG Electronics también comenzó a ensamblar en Ecuador, de la mano de la empresa Innacensa, en Durán.
Sunghwan Ma, presidente de LG en Ecuador, dice que la decisión se tomó para lograr una mayor competitividad en los precios, en un año en el que la situación económica podría ocasionar una contracción del consumo. “Queríamos un producto más competitivo en costo, traer un producto con precio adecuado para generar más demanda, aun en la difícil situación económica”, señala.
La diferencia de precios entre los televisores ensamblados en Ecuador y los importados es de un 20%, explica Javier Baldeón, jefe de la categoría Televisores LG.
Mientras el reto de la industria local es incrementar el componente local, los precios de estos productos en países vecinos o en Estados Unidos dejan atrás en competitividad al producto hecho en el país.
Leslie Martillo viajó hace un par de meses a Estados Unidos y aprovechó para comprar un televisor Samsung de 24 pulgadas. Pagó USD 200.
Martillo cree que los precios de los televisores en Ecuador son muy caros en comparación con los que se halla en EE.UU. “Mi hermano compró un Smart TV en Ecuador y ya sabía a cómo estaban los precios. Preferí comprar allá”, cuenta.
Precio de los televisores