Juan Carlos Guerrón
Desde algún tiempo se vienen realizando ajustes de salarios a empleadas domésticas, aumentos en mayor porcentaje con relación a otros salarios mínimos, diríamos que son justos; miremos a qué niveles de la ciudadanía prestan servicios: hoteles, restaurantes, oficinas, residencias, hogares de clase media, hogares de tercera edad.
Hay lugares comerciales a los cuales prestan servicios, los que tienen condición de pagar la elevación de estos salarios que le cargan al cliente.
En hogares de clase media, trabajan dos esposos por sueldos bajos, necesitan servicio doméstico (cocina, arreglo de casa, cuidado de niños, etc.). Si se suben demasiado los sueldos, se prescinde del servicio.
En hogares con sueldos de USD 400 y 600 ya no podrán tener empleada.
Los jubilados de tercera edad con pensiones USD 200, 400 ó 600 y por condiciones de salud y deterioro, necesita atención de servicio doméstico. Tomando en cuenta que a los jubilados del IESS nos consideran de tercera clase.
Con qué recursos van a pagar, si además tienen que pagar aportes, fondos de reserva, 13vo., 14vo. ¿Cuál es la solución? Despedirlas, ocuparlas medio tiempo, más desocupación.
Aumentar sueldos clase media un 50% y jubilados un 100%. Por favor piense bien antes de hacer las cosas.