Redacción Construir
Los apagones pusieron en escena varias alternativas para tener luz pese a la crisis. Una de las opciones en el mercado es la energía solar. Parecería caro gastar USD 8 000 en un equipo de este tipo pero, según los expertos en esto, es una buena inversión.
Si se toma en cuenta que la mayoría de los equipos de energía solar tiene una vida útil mínima de 25 años, por lo que al final usted no invierte sino ahorra, dice el ingeniero Diego Casares.
Para el ingeniero Guido Valdivieso, el uso de la energía solar y otras, como la eólica (viento), minihidráulica (cascadas), de la biomasa (naturaleza), geotérmica (volcanes) y del mar son algo más que una alternativa para tener en cuenta.
Y cobran cada día vigencia, pues las fuentes convencionales de energía usadas actualmente (petróleo, gas y carbón, principalmente) agotan sus reservas rápidamente. Pero hay otra razón para usar las energías renovables, explica el ingeniero Jorge Gavilánez: la ecología.
Claro, de todas estas energías alternativas, como también se las conoce, la solar es la de mayor aplicación por su facilidad de recolección. Y sus principales aplicaciones son de tipo térmico. Nada del otro mundo: la energía luminosa, mediante diversos mecanismos, se aprovecha en forma de calor.
Aunque una de las razones de la resistencia a su uso es el factor económico, la gente cobra conciencia y ve que su plata no será malgastada, reflexiona Valdiviezo. “La inversión inicial es alta pero se amortiza pronto. Un equipo de la menor calidad tiene un funcionamiento continuo de 10 años. Uno elaborado en materiales de alta especificación dura toda la vida”.
Con la energía solar, sigue Valdiviezo, podrá solventar el sistema eléctrico de la casa por más de 35 años; y el sistema térmico está garantizado de por vida.
Para una casa de 70 m², con 20 focos, refrigeradora (que es la que más consume) y lo indispensable para cinco miembros (cocina, agua caliente, equipo de sonido, computadora), el precio de un equipo está en USD 8 000, dice Casares. “Sin refrigeradora este valor se reduce a la mitad”.
La aplicación de esta tecnología tiene en Quito otro punto a su favor: por estar en la línea ecuatorial, el sol cae perpendicularmente, lo que aumenta el volumen de acumulación térmica. A esto se añade que 290 de los 365 días del año son soledados.
Otra de las ventajas es que el costo de la energía que se produce en el país no es costosa.
El equipo necesario
Un panel solar y un tanque de 30 galones es el equipo mínimo para este tipo de energía. Es capaz de producir 1,25 kw térmicos, suficientes para solventar las necesidades de tres personas, las 24 horas del día, los 365 días del año. Este sistema provee, además, agua caliente a 75 y 80 grados centígrados en los días abiertos (con mucho sol), y entre 30 y 40 en los días nublados o con lluvia (como los actuales).
En cuanto a las variaciones de los sistemas, aunque en la actualidad se utilizan células fotovoltaicas de silicio, explica Gavilánez, también existen otros sistemas que se están incorporando, como las células de indio más plomo o arsenio y gelio, que también son muy productivas. Las estructuras se fabrican de cobre, aluminio o de acero inoxidable.