Sídney. Reuters
La tenista número uno del mundo, Serena Williams, inició la temporada 2010 de la misma manera aplastante en que cerró 2009, al lograr ayer un arrollador triunfo por 6-1 y 6-2 sobre María Martínez, en su debut en el torneo de Sídney.
En su primer partido desde que venció a su hermana Venus en la final del Campeonato WTA, que dio el cierre a la última temporada, Williams demostró que sigue siendo la mujer a vencer.
La menor de las hermanas estadounidenses no jugó al máximo, luego de un receso de dos meses y padeció las agobiantes temperaturas en el centro olímpico de tenis de Sídney, pero se mostró encantada con su rendimiento con vistas al primer torneo del Grand Slam del año.
“Sentí todo bien. Obviamente, no sentí que jugué al máximo, pero de eso se trata el deporte, afrontar un partido en un momento y simplemente hacer lo que uno puede”, dijo Williams.
Del mismo modo que la líder del escalafón, la número dos, Dinara Safina, que cayó ante William en la final del abierto australiano el año pasado, también abrió su temporada 2010 con una victoria.
No obstante, la rusa debió luchar un poco más para superar por 7-5 y 6-4 a la polaca Agnieszka Radwanska, un resultado que la depositó en cuartos de final.
Safina hizo un receso tras la pasada temporada, para recuperarse de un dolor de espalda.