Una organización delictiva con nexos internacionales y que supuestamente se dedicaba al plagio de personas fue desarticulada en Loja.
La información la confirmó ayer Carlos Orbe, comandante de Policía de Loja. El oficial dijo que la aprehensión de cinco ecuatorianos y tres extranjeros ocurrió en un operativo denominado Frontera y en el que participaron uniformados de Ecuador y Perú.
Uno de los casos en que los sospechosos habrían participado es en el secuestro de Ángel C., de 65 años.
Él fue plagiado el pasado 27 de octubre, en el barrio Santa Teresa de Cariamanga.
A los 57 días de desaparecido se encontró su cuerpo sin vida, sepultado en una fosa, en el sector Roca Rajada del distrito Suyo, en Perú. Según Orbe, tras la detención del grupo se conocieron detalles de ese secuestro.
Según versión de los detenidos, la víctima murió a los 10 días del plagio, a causa de un paro cardiaco. Esto debía confirmarse o descartarse mediante una necropsia. Sin embargo, se señaló que por su alto estado de descomposición sería difícil determinar la causa del deceso.
Para desarticular la banda criminal, personal especial de la Policía coordinó el trabajo con la familia del fallecido. La Unidad Nacional Antisecuestros y Extorsión (Unase) realizó las investigaciones del caso.
Los supuestos captores pedían a los familiares del secuestrado USD 500 000 por su liberación. Con las investigaciones se descubrió cómo trabajó la banda durante tres meses. Según Orbe, el mentalizador del secuestro y jefe de la banda es el ecuatoriano Paúl V. J., de 38 años.
El inculpado laboró un tiempo como empleado del fallecido.
Por eso -dijeron los agentes- conocía todos los movimientos dentro de sus propiedades. El secuestrado era conocido en Loja como una de las personas adineradas. El día de los hechos se dirigía a una de las minas de su propiedad y que opera en el barrio Santa Teresa.
Los policías contaron detalles del secuestro y dijeron que bajo amenazas de muerte, los sospechosos lo bajaron de la camioneta en la que circulaba. Luego lo sacaron del país por caminos fronterizos que no son vigilados. Según declaraciones de los detenidos -dijo Orbe- el cabecilla de la banda fue el que planeó todo el procedimiento. Los policías no descartan que la red internacional tenga más nexos y no se conoce qué tiempo operaba.