El ministro José Serrano denuncia insistentemente una estrategia para caotizar el sistema de rehabilitación del país.
Hoy, durante un recorrido en el Centro de Detención Provisional (CDP) de Quito, Serrano, como ministro de Justicia encargado, denunció que tres bandas delictivas habrían planificado atentar contra la vida de ocho a 10 privados de libertad. No dio nombres ni precisó de donde eran los supuestos implicados.
El propósito -dijo- sería “caotizar el sistema de Rehabilitación Social y mostrar que no hay un adecuado control”.
Según el funcionario, días pasados encontraron un arma automática cargada en uno de los centros de privación de libertad, un plan de ruta, los nombres de las víctimas, entre otras evidencias.
Durante el recorrido en el CDP, los internos indicaron que sus condiciones de vida actuales son críticas. “No tenemos comida, dormimos en el suelo”, dijeron desde las celdas, mientras Serrano les explicaba que pronto serán reubicados en el Centro de Rehabilitación de Cotopaxi, a donde ya fueron trasladados 351 PPL (Personas privadas de la libertad).
Luego, Serrano y su comitiva, incluida la directora de Rehabilitación Ledy Zúñiga, viajaron a Saquisilí, en Cotopaxi, para un recorrido en ese complejo. Según la Cedhu, luego del traslado del primer grupo, a inicios de febrero, los familiares denunciaron la carencia de servicios básicos, como agua para su aseo personal, lo cual ha sido desmentido por el Gobierno. Las autoridades aseguran que las condiciones mejoraron sustancialmente.