Los gritos de los niños de la buseta escolar se escucharon a las 06:00 de ayer en la calle Inclana, en el barrio San Marcos, centro de Quito. Hasta allí llegaron seis armados, quienes amedrentaron a la mujer que despedía a su hijo que iba a la escuela para robarle.
“Sé que esperaban el recorrido cuando ocurrió el robo. Los niños lloraban y un hombre gritó¡esto es un asalto! Dos personas con armas ingresaron a la casa para robarles”, cuenta una moradora del sector, quien pidió la reserva de su identidad. Los desconocidos se llevaron dinero en efectivo y joyas de oro, que eran para la venta.
Otro testigo miró que el hombre armado amenazaba a los niños y al chofer de la buseta. “Él les gritaba; les decía que no lloren ni griten. El asalto fue impactante. Vecinos llamaron a la Policía”, refiere un morador.
Según el Sistema de Información para la Gobernabilidad (Sigob, base de datos del Régimen), los robos a personas se incrementaron este año, en Quito, en un 28%. Entre enero y marzo la capital registró 2 038 hechos, frente a 1 592 en igual período del 2011. Es decir, hubo 446 denuncias más de robos a personas. En enero se reportaron 626 hechos (frente a 512 de enero del 2011), en febrero 609 (457 el año pasado) y en marzo 803 (623).
La mañana de ayer, en medio de la retención armada de la buseta escolar, un habitante de San Marcos llamó a la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) del sector para que auxiliara a las víctimas. Cuando el patrullero con dos uniformados llegó a la calle Inclana, los desconocidos abrieron fuego.
Un agente recibió tres impactos de bala, dos en el hombro y uno en el pecho, mientras que otro uniformado sufrió cortes en la mano, por los vidrios de las ventanas del automóvil, que se rompieron por los impactos de proyectiles.
“Yo estaba en la puerta de la casa cuando ocurrió el asalto. En la balacera me quedé dentro”, dice una mujer. Luego del tiroteo, los armados huyeron en un automóvil de color plata y en una motocicleta negra. No hubo detenidos.
Los datos del Observatorio Metropolitano de Seguridad Ciudadana (OMSC) refieren que en las administraciones zonales Norte, Eloy Alfaro (sur) y Centro (a la que pertenece San Marcos) se reporta la mayor recurrencia de robos violentos a personas.
Hasta febrero del 2012, los datos del OMSC referían que un 33% de asaltos a personas se reportó en la vía pública, un 31,9% en vehículos, un 11,9% en oficinas y un 7% en viviendas.
En contraste con el incremento de robos a personas, el Sigob registró una disminución en robos a domicilios (sin gente adentro) en Quito. Entre enero y marzo de este año hubo 564 casos, frente a 732 reportados durante el 2011, una reducción de 23%.
Los vecinos de las víctimas del asalto contaron que esta es la tercera vez que se produce un hecho delictivo similar en la calle. Ayer, seis agentes del Grupo de Operación Motorizada impedían que fuera contaminada una evidencia: un fragmento de proyectil incrustado en una puerta de madera.
También había trozos de vidrio y huellas de sangre en la calzada. Criminalística levantó las evidencias cerca de las 12:00. La bala fue introducida en una funda.
Un nexo con el crimen
La Policía vincula a dos sospechosos de asaltos a personas con sicariato. A las 03:00 del miércoles, José S., y Diego M., fueron detenidos en La Gasca, en Belisario Quevedo, centro-norte de Quito.
Jorge Hadathy, jefe policial de ese circuito, manifestó ayer que los sospechosos posiblemente se dedicaban no solo a robar personas en la vía pública y a asaltar a locales, sino también al sicariato. Se hallaron dos revólveres 38 mm y una caja con 50 balas.
“Debido a la cantidad de denuncias presentadas, se realizó un allanamiento en su casa”, sostuvo Hadathy. Los agentes dijeron que allí hallaron dos bigotes postizos. Tras la audiencia de flagrancia, el Juzgado XXIII de Garantías Penales ordenó la prisión preventiva de los dos inculpados.
Evite ser víctima
Alerta. Pida las credenciales de mensajeros, funcionarios de la luz, vendedores, etc., antes de abrir la puerta de su vivienda.
Precaución. Antes de salir a la calle observe si hay personas sospechosas alrededor. Si es así, llame al 101 de la Policía.
Seguridad. No transite por la calle con objetos de valor. Las personas distraídas o deprimidas son más vulnerables al asalto.