En la televisora RTS la programación a las 08:00 era normal, cuando agentes de la Policía Nacional llegaron a sus instalaciones, en Lomas de Prosperina, una zona industrial en el norte de Guayaquil.
Llegaban a buscar al ex asambleísta de Alianza País (AP) Balerio Estacio, quien daba una entrevista. A los pocos minutos él salió, con la Biblia en su mano, para que se cumpliera una orden de detención que había en su contra.
El comandante de Policía del Guayas, Miguel Chiriboga, le leyó los derechos. Según la boleta de captura, se detuvo a Estacio para investigar las supuestas conexiones con el tráfico de tierras.
Chiriboga dijo que esa boleta de detención no era la única que se emitiría por ese delito. Pero no confirmó los nombres de los otros presuntos implicados.
La acción policial se ejecutó dos días después de que el presidente Rafael Correa insistiera en que no permitirá más invasiones en el norte de Guayaquil. Además, motivó a los moradores de Voluntad de Dios, Tierra Prometida y La Fortaleza para que dejaran de pagar a los supuestos traficantes por un terreno, ya que era ilegal.
Estas cooperativas de vivienda son las más recientes invasiones a un costado de la vía a Daule, que colindan con populosas zonas como Montesinaí, Flor de Bastión, Sergio Toral, Ciudad de Dios y otras. Son extensas zonas de tierra y lodo, de casas construidas con madera y caña guadúa. Los habitantes pagan USD 1 semanal por guardianía. Además, USD 60 para tener luz eléctrica y 200 mensuales por el terreno. El valor final del predio varía entre USD 2 000 y 5 000. “Si vienen traficantes de tierra a querer explotarlos avisen a los soldados”, dijo Correa, quien anunció que ese sector sería zona de seguridad.
Estacio fue asambleísta de Guayas por el movimiento de Gobierno para la Constituyente de Montecristi. Durante las sesiones de la Asamblea mostraba su Biblia y apelaba a sus creencias evangélicas. Antes perteneció al Partido Social Cristiano (PSC), con el que trabajó en las zonas populares. En los barrios que colindan con la vía Perimetral hay una cooperativa que lleva su nombre, una escuela y una línea de buses.
El día de la visita de Correa y durante el censo que realizó el Ministerio de Inclusión Social (Mies), el miércoles pasado, los habitantes mencionaron a Tony y Balerio Estacio como las personas que les vendían las tierras.
Ayer, cuando los agentes se llevaron a Estacio, afuera de la televisora sus simpatizantes gritaban a su favor. “Si no fuera por él yo no tendría casa”, decía una mujer entre sollozos, ella había acompañado al dirigente al canal.
“Yo no soy invasor ni traficante de tierras, soy propietario…”, fue una de las primeras cosas que dijo el detenido cuando llegó a la Policía Judicial (PJ). Ahí tenía que esperar hasta la hora de la audiencia de medidas cautelares, prevista para las 16:00. Su llegada coincidió con la presencia de los equipos periodísticos que informaban en vivo las novedades de crónica roja en la mañana. Las cámaras de TV captaron a un Balerio sonriente, al que se le permitió hacer declaraciones a la prensa.
Poco después llegó Santos Valencia, coordinador barrial, quien afirmó que Estacio se entregó para desmentir cualquier acusación en su contra. Según el ministro del Interior, Alfredo Vera, dijo que la detención de Estacio se trató de la ejecución de una orden judicial y no de algún abuso o exceso de autoridad.
En la tarde, 20 moradores de las zonas invadidas llegaron a la PJ en una camioneta policial. El policía Jhon Romero dijo que los ciudadanos se acercaron para rendir sus declaraciones voluntariamente y que los uniformados solo les ayudaron con la movilización.
A las 17:00, unos 40 partidarios de Estacio se aglomeraron en la puerta de entrada a la PJ. Isidro Gómez tenía un cartel que decía “estamos contigo”. El hombre vive con su esposa hace tres años en Tiwintza de la Flor, una de las invasiones del norte. “El señor presidente (Correa) está cometiendo una injusticia, porque nosotros le dimos el voto a través del abogado Balerio Estacio”, comentó.
A las 17:00 de ayer la audiencia de medidas cautelares aún no empezaba en la Policía Judicial.
La cronología
En 1996
Balerio Estacio lidera alrededor de 13 barrios populares en Guayaquil. Fue consejero provincial del Guayas por el Partido Social Cristiano de 1996 a 1998 y del 2002 al2004.
En el 2006
En la primera vuelta electoral, Estacio respaldó a Cynthia Viteri, candidata del Partido Social Cristiano. Incluso estuvo en campaña con León Febres Cordero.
En el 2006
En la segunda vuelta, Balerio Estacio apoyó en Guayaquil a Rafael Correa. Esa campaña llevó a la Presidencia al actual Mandatario. Convertido al cristianismo, Estacio siguió en Alianza País.
En el 2007
Balerio Estacio fue asambleísta en la Constituyente de Montecristi. Llegó con la lista 35, Alianza País (Gobierno), en la nómina de candidatos por el Guayas.
La propuesta
‘Encaminar bien al joven’
Enrique Maisincho
Dirigente juvenil – Quitumbe
Como jóvenes estamos tratando de que todos los chicos se integren a las áreas deportivas y culturales. En Buenaventura (Chillogallo), por ejemplo, tenemos algunas actividades deportivas y hasta un coliseo para practicar estas actividades.
Además, practicamos danza, música, guitarra, títeres, maquillaje infantil. Creemos que solo estas cosas ayudarán a que los chicos se alejen de las cosas mala y hagan actos positivos por una mejor sociedad. Hay que encaminar bien a los jóvenes.
Lastimosamente los barrios del sur (de Quito) tienen esa falencia (en cuanto a inseguridad). Los vecinos deberíamos ayudarnos más y cooperar. Muchas veces no nos importa lo que le pasa al otro. Vemos que les roban y prácticamente no hacemos nada.
A mí también me han asaltado. Fue una noche cuando caminaba a la casa. Un carro se paró junto a mí y allí iban cuatro personas. Me hicieron subir a la parte de atrás y me robaron todo.
‘No he podido salir adelante’
Jorge Canchingre
Víctima de la delincuencia
Yo he sido víctima de los delincuentes varias veces. Hace dos meses, a las 21:00 mientras me iba a casa me sorprendieron dos personas armadas y me quisieron robar dinero, pero no tenía nada. Por eso se llevaron solo el celular. Lo mismo pasó hace un año. Ahí los ladrones sí dispararon al piso. Luego de intimidarme se llevaron el celular y no pude hacer nada.
En esa ocasión no fui el único afectado. Luego todos los vecinos nos dimos cuenta que los asaltantes andaban en un carro y que iban robando a quienes encontraban al paso. Le asaltaron a un amigo y a un vecino. Eran los mismos.
Recuerdo que ese día caminaba tranquilamente y de pronto se paró un carro en el que iban cuatro hombres. Dos se bajaron y uno de ellos hablaba por teléfono y hacía como que se comunicaba con una chica. Pero cuando estaba pasando cerca de él me atrapó y me robó.
Lo más fuerte fue hace un año cuando asaltaron el local, que tenía en el norte de Quito. Se llevaron como USD 6 000 en mercadería e hicieron que quiebre el negocio.
Lo poco que quedó lo traje acá (otro local) y hasta ahora no he podido salir adelante. Aún tengo problemas con los acreedores. He tenido que hacer préstamos para pagar la deuda y hasta he ido al chulquero. Esas son las secuelas de la delincuencia.