Nuevos incidentes se produjeron en el sector de Ciudad de Dios. Moradores de este populoso sector en Monte Sinaí, noroeste de Guayaquil y la Policía se enfrentaron durante una protesta.
A las 04:00, habitantes de esta zona que forma parte de los desalojos que ejecuta el Gobierno Nacional, iniciaron con las primeras protestas. A esa hora quemaron varias llantas convocando a los moradores de la zona.
Pero fue pasadas las 08:30 que comenzaron a llegar policías y militares para continuar con las tareas de notificación y desalojos en zonas consideradas invasión.
La ciudadanía lanzó gritos en contra de la medida del Gobierno y exigían que el presidente Rafael Correa llegue al sitio para conversar y buscar soluciones.
Jenny Quimí, muy alterada aún por la represión, que incluyó el lanzamiento de gases lacrimógenos, dice que lo que buscan es que se acaben los desalojos y que se les permita, a los que tienen años viviendo allí, que se queden.“El miércoles pasado quedamos de acuerdo con el Intendente (Julio César Quiñónez), de que ya no iban a darse más desalojos”. Pero añadió que siguen tumbando casas y reprimiendo con gases. “Mi hijo de 13 años tiene aneurisma y eso no le importó a la Policía”, dijo Quimí.
Ella y su vecina Consuelo Montoya, coincidieron en que, como la mayoría de personas de ese y otros sectores, no tienen los recursos para acceder a la reubicación que propone el Gobierno.
“Tenemos que pagar USD 600 para tramitar la casa y luego 600 más para cuando nos las entreguen y, después, pagar las mensualidades. Yo no tengo para cubrir eso. Soy padre y madre de 7 hijos, una es especial a quien un policía en una moto la tiró al piso”, expresó Montoya.
Cuando la Policía intentó retirar los obstáculos del único camino que conecta a la vía Daule con la Perimetral, comenzaron los forcejeos, insultos y agresiones. 13 personas fueron detenidas por alterar el orden público. Se suman a otro ciudadano detenido el miércoles, en el mismo sitio y en igual circunstancias.
Una vez reabierta la vía y controlada la situación, personal uniformado, al mando del comisario Sexto, César Cabrera, continuó con las notificaciones a los ciudadanos de esas zonas. En las mismas se les otorga cinco días de plazo para desalojar por voluntad propia sus viviendas.
En tanto, a 2 km de allí, en la cooperativa Sergio Toral I la vía principal fue cerrada con la quema de llantas. Allí, en cambio, los moradores exigen del Gobierno que cumpla con la construcción de una escuela fiscal, ya que con los desalojos se cerraron las particulares. No hubo enfrentamientos ni detenidos. “No tenemos para seguir pagando escuelas particulares. Nos matricularon y dijeron que las clases empezaban el 2 de mayo pero hasta ahora no hacen nada”, se quejó Jazmín Quiñónez.
María Mendoza comentó que la Ministra de Educación estuvo hace un mes en la Escuela Fe y Alegría. “Dijo que los primeros días de abril se acondicionaría la institución pero no se ve nada”.
Se calcula que unos 2 500 niños de la zona están a la espera del inicio de clases. Josefina Rodríguez propuso que el Gobierno bien puede expropiar el local de la Escuela Sergio Toral. Los moradores protestaron también por la inseguridad. Hubo un robo en una lavandería.