La mañana de ayer, Martha Albán esperaba escuchar la bocina del recolector para sacar la basura de su casa, ubicada en la calle Caluma, sector de La Argelia, en el sur.
La alerta no sonó y colocó las fundas con los desechos, acumulados desde el martes último, frente a su vivienda.
A las 11:00, el camión de la Empresa Pública Metropolitana de Aseo (Emaseo), conducido por Jorge Hidalgo, llegó por primera vez hasta el lugar, sin pitar. Tres trabajadores, vistiendo jeans y gorras azules, retiraron los desechos de las veredas.
“Estábamos acostumbrados a que el carro pitara. Hoy tuvimos que estar pendientes a que el camión pasara”.
Esto fue parte del primer día de la recolección de Emaseo, que retomó la limpieza del Centro Histórico y del sur de la ciudad, luego de siete años. En este tiempo, el Consorcio Quito Limpio se encargó de esa tarea.
Desde las 07:00, los trabajadores salieron de la planta ubicada en la avenida Occidental hasta los diferentes puntosde la ciudad. A Hidalgo, quien trabaja en Emaseo desde hace 16 años, le tomó de nuevo las empinadas calles que hay en el sur.
Un mapa en el cual se mostraba los dos recorridos que debía cubrir estaba en el asiento contiguo al del chofer. “Ruta 1: 22,23 km y Ruta 2: 8,93 km”, se leía en la hoja. Las letras estaban pintadas con marcador rojo y azul.
Con una sonrisa amigable decía que trabajará hasta que las calles estén limpias. “Hoy no tenemos horario”, aseguró Hidalgo.
Ante el pedido de Albán, de que pitara para anunciar su llegada, Hidalgo respondió que no le dieron la grabación para activar el altoparlante del vehículo.
200 metros más bajo de la vivienda de Albán, en las calles Picoazá y Calceta, Jazmín Delgado observaba cómo sus vecinos sacaban las fundas luego de que pasó el recolector. Ella atiende una tienda en la casa E6-166.
“Hasta el miércoles, el carro pasaba dos veces por aquí. Cuando la gente no alcanzaba a sacar la basura a lo que subía, lo hacía al regreso. Ahora no vuelve”.
Otras calles del mismo sector como la Macuchi, Santa Lucía, Pueblo Viejo y Ventanas, estaban limpias hasta el mediodía.
Una realidad parecida se notaba en la calle principal de la Lucha de los Pobres (suroriente), donde el camión recolector pasó alrededor de las 10:00. Allí se cambiaron los días de recolección.
Marlene Ordóñez, de Víveres Gaby, comentó que ella y sus vecinos se acostumbrarán a que el camión pase los martes, jueves y sábados. Antes pasaba los lunes, miércoles y viernes.
En el primer día que Emaseo empezó a operar en el sur de Quito, se registró el accidente de uno de sus vehículos que sirven para la supervisión. Ocurrió en la avenida Simón Bolívar, a las 10:00.
El subteniente de Policía Fabián Coello, de la Unidad de Vigilancia Sur, informó que de acuerdo con la versión del conductor, el Mitsubishi blanco, sin placas, perdió el control luego de que la llanta delantera izquierda explotara.
El vehículo, que iba en sentido norte-sur, atravesó el parterre, cruzó la vía en sentido contrario y se impactó contra la bodega de una vulcanizadora. A su paso también destruyó una lavandería y un baño, que en ese momento estaba desocupado.
A lo largo de la Simón Bolívar, ayer persistían los botaderos informales. Eso, a pesar de que el Municipio colocó rótulos grandes para comunicar a la población que está prohibido botar basura en esos sitios.
Ramiro Andrade, dueño del Micro Los Pinos, aseguró que estos botaderos informales generan una mala imagen para el sector y son focos de insalubridad.
El alcalde de Quito, Augusto Barrera, hizo un llamado a la ciudadanía para que se informe y respete los horarios de recolección. “Limpie su acera y saque la basura a la hora adecuada”.
El Municipio habilitó la línea 1800 456789, para receptar las denuncias de quienes ensucien las calles. También se lo puede hacer al correo electrónico denuncias@emaseo.gov.ec.