Ayer en la Plaza de San Francisco, se celebró el evento Noche de Mujeres.
Decenas de hombres y mujeres de todas las edades se reunieron en el lugar a propósito del Día internacional contra la violencia hacia las mujeres, que se recuerda cada 25 de noviembre.
La concentración se originó en la Plaza del Teatro, desde donde se dirigió a San Francisco a las 16:15. Estuvo conformada por estudiantes del colegio mixto Humberto Mata Martínez, quienes con globos y silbatos, gritaban consignas como ‘No a la violencia’ y ‘No al machismo’. El concejal Norman Wray, quien encabezó la marcha, animaba a los estudiantes.
El objetivo del evento fue sensibilizar sobre la violencia que sufre a diario la mujer en sus hogares y el espacio público.
En el 2010, se registraron 15 162 denuncias de violencia contra mujeres en Quito. Las estadísticas muestran que la problemática ocurre sobre todo en el espacio público. 75% de las mujeres de entre 18 y 32 años dijo haber sido víctima de acoso en la ciudad.
Durante la tarde, había poca gente en la plaza. El frío era intenso y llovía. A las 17:00, se proyectó un video de la campaña Quiero andar tranquila, calles sin acoso, que presentó varios testimonios de mujeres víctimas del acoso en el transporte y las calles. “Cuando pasas junto a las construcciones siempre te dicen cosas”, dijo una de ellas. “En el trolebús, los hombres se me pegan”, contaba otra.
Cerca de las 18:00, apareció en la tarima el alcalde Augusto Barrera, quien hizo un llamado a un cambio de actitud. “No puede ser que las mujeres trabajen más y que los hombres sean los dirigentes de los barrios”, dijo.
Con el pasar de las horas, el evento convocó a mayor cantidad de gente, atraída por la feria artesanal que había en el lugar, los refrigerios y los números musicales. Solange Jiménez y Eugenia León fueron algunas de las artistas que se presentaron. También cantó la reconocida salsera puertorriqueña La India.
Otro de los eventos que tuvo gran acogida fue la campaña Cartas de Mujeres, que invitó al público a expresarse a través de cartas. Estas eran depositadas en ánforas especiales.
En ellas varias asistentes manifestaron el deseo de que haya igualdad entre hombres y mujeres, como la niña Helen Coba, de 9 años. “De grande quiero ser policía”, manifestó. Otras relataron sus experiencias con la violencia intrafamiliar. Nelly M. escribió sobre el maltrato verbal que recibe por parte de su esposo. Los hombres también participaron de la iniciativa, como Galo Tama. “La mujer es muy valiosa porque nos da la vida”. Para estar en la plaza, los hombres debían firmar un salvoconducto simbólico.